El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha querido cumplir con el factor sorpresa que marcan los cánones de una buena crisis de gobierno con la salida de los mayores pesos pesados del Ejecutivo. Tal y como avanzó Libertad Digital, Sánchez prescinde de su vicepresidenta, Carmen Calvo, aunque la gran sorpresa es la salida del jefe de gabinete del presidente, Iván Redondo, quien abandona el Ejecutivo sin destino conocido.
El todopoderoso gurú de Sánchez abandona el Ejecutivo, según sus cercanos, por decisión suya, aunque las fuentes consultadas por este diario apuntan a una cruenta batalla tras la cual Calvo ha concluido "feliz" por haber logrado arrastrar a Redondo con su salida. Según ha podido saber este diario, su puesto lo ocupará el actual Director General de Paradores, Óscar López.
Sánchez no menciona a Redondo
Sánchez compareció pasadas las 15 horas en el palacio de la Moncloa con una mención expresa de gratitud hacia los ministros salientes. "Han demostrado tener una situación de servicio público extraordinario. Quiero agradecer expresamente a Carmen Calvo, a Arantxa González Laya. He sido testigo del temple excepcional y por eso la expresión de gratitud no es un mero formalismo. Es un reconocimiento a homnbres y mujeres que se han dejado la piel en momentos muy duros". Ni una palabra dijo de su hombre de mayor confianza dede hace dos años en el Palacio de la Moncloa.
Bolaños gana
La otra sorpresa es Félix Bolaños. El hasta ahora secretario general de Presidencia asciende a las alturas de Moncloa como ministro de la Presidencia recayendo sobre él la estructura y el engranaje interno de La Moncloa. Un ascenso que fuentes socialistas interpretan como "la victoria del partido" frente a Redondo, ya que Bolaños era el hombre del PSOE en Moncloa y contrapeso al poder ilimitado del jefe de gabinete en el Gobierno.
La salida de Calvo cambia la estructura del Gobierno. Se elimina una vicepresidencia y refuerza la vicepresidencia económica de Nadia Calviño como primera vicepresidenta. Como portavoz coloca a otra mujer, Isabel Rodríguez, quien también asume la cartera de Política Territorial. Su predecesora, María Jesús Montero, asume la cartera de Función Pública.
Los otros cesados: Ábalos, Laya, Duque, Celaa…
Abandonan Moncloa por tanto los dos miembros del Gobierno con peores relaciones pero cae otro de los puntales del presidente: José Luis Ábalos sale del Gobierno para centrarse en sus funciones como secretario de Organización del PSOE. Su puesto al frente del ministerio de Transportes recae sobre la alcaldesa de Gavá, Raquel Sánchez.
Respecto a otros movimientos, fuentes gubernamentales confirman el cese de la ministra de Exteriores, Arantxa González Laya, puesto para el que el presidente recupera al embajador en París, José Manuel Albares; Isabel Celaá, ministra de Educación, a quien le sustituirá la socialista zaragozana, Pilar Alegría, una de las integrantes de la primera ejecutiva de Sánchez en Ferraz; Pedro Duque como ministro de Ciencia y José Manuel Rodríguez Uribes en Cultura y Deportes donde será sustituido por Miquel Iceta, quien no será ni vicepresidente ni portavoz del Gobierno. También abandona el Consejo de Ministros el titular de Justicia, Juan Carlos Campo, apenas una semana después de la concesión de los indultos. Le sustituirá en el puesto la actual presidenta del Senado, Pilar Llop.