
El Mundo
"El aumento de actos de violencia política en Cataluña desmiente la "normalización" de la que presume Sánchez". Nunca le perdonaremos que nos haya devuelto a 2017, qué tortura. Dice Rafa Latorre que hay que abordar el origen del "trauma" catalán. "A millones de catalanes se les abrió una herida emocional, que no ha dejado de sangrar, cuando se enteraron de que el patriarca del catalanismo moderno era un ladrón. Jordi Pujol cometió delitos, sí, pero su persecución por parte del Estado sólo ha provocado desafección y tristeza. Urge que la política solucione generosamente el problema generado por la acción judicial". Eso, hay que ayudar a Jordi.
"Sería una injusticia que la generosidad del Estado no arropara a Pujol y a todo su clan. Si la amnistía viene a suturar con olvido las venas abiertas de Cataluña, que no se olviden del hombre con el que todo empezó, la gloria y el trauma. Hay una familia que sufre y, con ella, todo un país. El Estado debe pedir perdón, que tal cosa es la amnistía, por haber arruinado la reputación de aquel al que en días más felices cubrió con el honor de español del año". E indemnizarle por haberle hecho pasar un mal rato. Todo sea por la concordia.
"No hay ningún motivo para amnistiar a Puigdemont y castigar a Pujol. Ninguno. Porque, además, a Pujol, como a cualquier catalán que haya tenido algún problema con la Justicia, ya sea el asesino de Pedralbes, le asiste la razón fundamental. La amnistía es constitucional, que lo dice El País". Y lo que dice El País, aunque sea un día una cosa y al otro la contraria en función de los cambios de posición política de su jefe Sánchez, va a misa.
Federico Jiménez Losantos recuerda la Brigada Político Social de Franco. "Todas las dictaduras se parecen y Sánchez está armando su policía política, la Brigada Político-Fiscal, para desprestigiar a sus opositores denunciándolos por no pagar impuestos o filtrando sus declaraciones, o abriéndoles en los medios un expediente por fraude, que, aunque años después se cierre sin delito, habrá destrozado la vida de esas personas".
"El siglo XXI trae dictaduras mediáticas, de linchamiento personal y cancelación social. El Getafe borrará de su campo el nombre de Alfonso Pérez por decir lo que piensa del fútbol femenino. Si el club llega a tener dignidad y se hubiese negado a jugar en el coliseo desbautizado, mandan a la Brigada Político-Fiscal, y a Segunda". Y la hoguera de la nueva inquisición el que discrepe.
Dice Raúl del Pozo que "el «insensato sin escrúpulos» que decían los de El País se ha transformado en un político que nos lleva al borde del abismo con gran determinación". No, Raúl. Ya estamos en el abismo. Entramos el 23-J.
El País
"El PSOE se prepara para enviar a un miembro de su cúpula a reunirse con Puigdemont cuando esté maduro el pacto". A rendirle honores al forajido nuevo mandamás de España. Qué Puchi les obligue a besarle los pies, después de lo que ha dicho de él. Sería divertido que el fugado le diera una patada en sus partes al enviado, que parece que va a ser el vasallo de Sánchez Santos Cerdán.
Cuenta Cué que la foto es una exigencia del golpista, y "los socialistas están dispuestos a hacerlo siempre que el pacto esté cerrado, como conclusión de la negociación, y no antes". Una no sabe si reír o llorar. "Parece inviable políticamente, según las fuentes consultadas, que esa foto sea entre Puigdemont y Pedro Sánchez". Como si eso tuviera alguna importancia. De todos modos que no desespere Puchi, Bildu ha esperado cuatro años para esa foto con Sánchez y la va a tener en unos días.
La foto "supondría también un claro reconocimiento político al líder de un partido que será fundamental para la mayoría que Sánchez está buscando no para la investidura, sino para toda la legislatura". Así de clarito, vamos a dejarnos de concordias ni reencuentros ni mentiras. Son los votos. Se agradece la sinceridad, Cué.
El periodista desvela cómo intentará colarla Sánchez esta vez. "Cuando llegue la foto del representante de Sánchez con Puigdemont, el PSOE explicará que ellos están buscando soluciones para el conflicto catalán". No hace falta que se esfuerce mucho, la gente traga con todo, lo hemos vivido.
Josep Ramoneda, además de mentir sobre la aceptación de las lenguas en la UE, que da por hecha y da enlace a una noticia del mismo periódico que le desmiente, dice que "los discursos fundamentalistas, la retórica de la España que se rompe, el desvarío de los que sin la menor conciencia de las relaciones de fuerzas siguen afirmando que hay que hacer efectiva la independencia ya y la indignación por la traición de Sánchez que agitan el PP y los señoritos del PSOE de los ochenta, son fundamentalmente ruido". Este es el nivel de la basura ultrasanchista.
ABC
"Armengol aparca el control al Gobierno que Sánchez exigió a Rajoy". ¿Y qué esperan en una dictadura del siglo XXI? "Han bastado unas pocas semanas con Francina Armengol al frente del Congreso para evidenciar algunas carencias en el perfil de la presidenta. A sus dificultades para mantener el control durante los plenos y a su explícito partidismo, contrario a la alta responsabilidad que ejerce, se suma ahora el hecho de que, hasta la fecha, no se haya convocado ninguna sesión de control al Gobierno", dice el editorial.
Rosa Belmonte sale en defensa de Alfonso Pérez, última víctima del fascismo neofeminista. "Alfonso Pérez había dado su parecer sobre el fútbol femenino, que habrá evolucionado, pero no se puede equiparar al masculino. Anatema y obviedad. La expresión sentido común tiene muchas capas de polvo y grasa, pero habrá que ir rehabilitándola, como han hecho en el Reino Unido al vetar el ingreso de mujeres trans en las áreas exclusivas para mujeres de los hospitales. Según el ministro de Sanidad británico, tienen planes para restaurar el sentido común. Desde el 'new deal' de Roosevelt no había visto una acción de gobierno más ambiciosa". Jo, qué bien hicieron los británicos largándose de la UE.
La Razón
"El PP necesita ganarle a Vox millón y medio de votos". "No está todavía confirmada la investidura de Pedro Sánchez, pero el PP la da tan por hecho que ya ha pasado a la pantalla siguiente", cuenta Carmen Morodo. Ya era hora.
"Los gurús demoscópicos de cabecera les hicieron creer en la campaña electoral que el efecto Vox estaba más que amortizado entre la opinión pública. Y hoy, sin embargo, el PP no solo reconoce que no es así, sino que dentro del equipo de dirección admiten que no podrán volver a gobernar España en tanto Vox mantenga su nivel actual de porcentaje de voto y de escaños". Tampoco hay que minimizar la influencia de los medios sanchistas, en uno de los cuales es habitual Morodo. Durante la campaña no se les caía Vox de la boca. Ahora ya es como si no existieran.
Sandra Golpe nos reta a una porra. "Por mucho que aumente su lista de exigencias, Puigdemont sabe que le conviene ceder a la pretensión del referéndum de autodeterminación. Más que nada, porque está en juego su propio dinero. El suyo, el de Artur Mas, el de Oriol Junqueras y el de más de 30 ex cargos del Govern. La amnistía que piden ERC y Junts incluiría perdonarles varios millones de euros por la responsabilidad contable del Procés. Un dinero que tendrían que devolver de su patrimonio personal. Solo por ese pequeño gran detalle, si hacemos una porra yo voto que habrá Sánchez para rato, sobre arenas movedizas". Eso es trampa, Sandra, "rato" es muy impreciso. Yo voto que habrá Sánchez para décadas. Es más, no es inverosímil que tengamos 40 años de dictadura sanchista, por muchas elecciones que se hagan. Somos Venezuela.
Abel Hernández pone sus esperanzas en la calle. Con el Rey "maniatado", el Constitucional "tomado por el sanchismo", lo mismo el legislativo, como se vio "con la fallida investidura de Feijóo que la sumisión de los diputados socialistas, nacionalistas y comunistas es total e inquebrantable". "Tampoco se puede confiar en lo que fue el «cuarto poder». Hoy el «sanchismo» tiene a su servicio a poderosos medios de comunicación, que son los que lo mantienen vivo. Y, ante la gravedad de la situación española, Europa mira para otro lado, y los dirigentes europeos se divierten en Granada con Pedro Sánchez de anfitrión". Luego se quejarán del creciente euroescepticismo.
"Sólo queda la calle, donde se barrunta una rebelión ante el aumento de la provocación política. De ahí la importancia de la manifestación del domingo en Barcelona, contra la amnistía a los golpistas y en defensa de la Constitución. Será un termómetro del malestar reinante y una llamada a la reflexión de todos. De momento será un aviso y una clamorosa demostración de que Pedro Sánchez ha perdido el favor de la calle". Ay, Abel, eso es agua pasada. La calle, como tu dices, fue la que votó el 23J. Sánchez logró un millón de votos más que en las anteriores elecciones. Pudo más el miedo a Vox que al sanchismo. Eso es lo que hay y solo queda la posibilidad del exilio. Yo pido por favor a Ayuso que si consigue un cohete que la traslade al búnker de Nueva Zelanda, me haga un sitito, no ocupo mucho. Y que no espere a que España se vaya al carajo. España se fue al carajo el 23-J.






