
Ya antes de que se produjera, la entrada en prisión de José Luis Ábalos y Koldo García amenazaba con romper la tranquilidad que el PSOE lleva año y medio esforzándose en aparentar. Sin embargo, es ahora cuando en Ferraz empiezan a temer que su particular castillo de naipes comience a desmoronarse. A las entrevistas que los imputados concedieron antes de entrar en Soto del Real, se suma ahora las que está empezando a conceder el hijo mayor del ex ministro.
"Santos le ofreció un cheque en blanco a mi padre en nombre del presidente", dice este lunes Víctor Ábalos en el diario El Mundo, donde revela, además, la estrecha relación que el que fuera número 2 del PSOE mantenía con Pedro Sánchez. Amén de las versiones interesadas de unos y otros -él niega que su padre cometiera cualquier ilegalidad a pesar de las múltiples pruebas recopiladas en los informes de la UCO-, lo que es un hecho es que su testimonio puede resultar clave, por cuanto, a pesar de no estar imputado, su nombre aparece de forma recurrente en todas las investigaciones realizadas hasta el momento.
Los agentes están convencidos de que él es el custodio del dinero en efectivo de su padre, al que habría ingresado más de 56.000 euros por diferentes vías en los últimos años, buena parte de él desde Colombia. Además, él fue el que negoció para el ex ministro el famoso piso de Castellana valorado en 1,9 millones con el que la trama quería asegurarle el pago de las mordidas por el presunto amaño en la adjudicación de obra pública. Y, por si fuera poco, su nombre aparece metido de lleno en negocios relacionados con el petróleo de Venezuela.
Miles y miles de euros
Víctor es fruto del matrimonio de Ábalos con su primera mujer, Pilar Aguado. Con tan sólo 20 años, en 2002, fue adjudicatario de la administración de loterías número 46 de Valencia, según consta en el BOE. En el perfil de la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa, se describe a sí mismo como un "profesional de acción con visión estratégica" y ha dirigido al menos tres empresas.
La primera vez que la UCO aludió a los pagos de Víctor Ábalos a su padre fue en el informe de Santos Cerdán que conocimos el pasado mes de junio. En él, se recogía una conversación de éste último con Koldo García, en la que el asesor apuntaba a la delicada situación económica del ex ministro y revelaba que le había "pedido el favor a su hijo y, a través de una empresa de Colombia, le están dando 1.000 pavos al mes".
Ya en el informe patrimonial del propio Ábalos hecho público el pasado mes de octubre, los investigadores profundizaron más en los pagos y desvelaron que, entre 2021 y 2024, su hijo le traspasó un total de 56.019 euros: 23.379 desde sus propias cuentas y 32.640 a través de una de sus empresas, External Programmes Consulting SL, teóricamente, en concepto de alquiler de su vivienda en Bétera (Valencia).
Las conversaciones que le delatan
Al margen de esos movimientos bancarios, la UCO constata que las conversaciones grabadas por Koldo García e interceptadas cuando fue detenido en febrero de 2024 "sugieren que, al menos desde 2022, Víctor Ábalos habría entregado dinero en efectivo a su padre de forma recurrente, constituyendo una vía de provisión de fondos al margen de sus ingresos declarados".
Entre los indicios que se esgrimen en el informe, se alude a esa conversación del 2 de febrero de 2022 en la que Koldo García le dice a Santos Cerdán que Víctor Ábalos le estaba dando a su padre "dinero en efectivo con origen en Colombia". Además, los investigadores también hacen referencia al reproche que el 23 de noviembre de 2023, Koldo García le hace al propio Ábalos, preguntándole cómo era posible que se hubiera podido gastar 470.000 euros en dos años, sugiriendo que su hijo debía conservar parte de ese dinero.
Estos y otros indicios llevan a la UCO a concluir que Víctor Ábalos "sería el custodio de dinero en efectivo que podría pertenecer" a su padre, algo que vendría respaldado por otras conversaciones que también aparecen registradas en los informes.
Así, una vez que Koldo García empieza a asumir de manera recurrente distintos gastos personales de Ábalos, los investigadores detectan una conversación (febrero de 2023) en la que el asesor escribe al hijo del ex ministro y le dice que necesita 1.500 euros mensuales, a lo que el Víctor Ábalos responde "es verdad".
"Teniendo en cuenta que no se han localizado en las cuentas bancarias de Koldo transferencias por ese importe procedentes de Víctor Ábalos, se refuerza la inferencia de que este último dispondría de una reserva de efectivo" a favor de su padre. Además, los agentes destacan cómo ambos personajes utilizaban "líneas seguras a las que se referían en el lenguaje convenido como café"; una palabra que el asesor también utilizaba en conversaciones con otros investigados.
Testaferro y clave en su posible fuga
Con todo, a pesar de que la UCO no se refiere a él como testaferro, ese es el papel que se le presume de todas las diligencias practicadas hasta el momento. Además, aunque sin mencionarle expresamente, el juez volvió a subrayar la importancia de la figura de Víctor Ábalos en el auto que sirvió para enviar a prisión provisional a su padre, apelando al riesgo de fuga que se apreciaba, debido a sus vínculos internacionales.
En este sentido, Leopoldo Puente remarcó la relación del exministro con la fundación Fiadelso, "a la que podría continuar familiarmente vinculado" e hizo hincapié en que, de acuerdo con las primeras pesquisas, "vino recibiendo periódicamente ingresos procedentes de uno de sus hijos, obtenidos al parecer en el extranjero, con independencia de que se tratara o no de un préstamo", tal y como alegó su defensa.
"No hay razón alguna para considerar que esos mismos fondos, en uno u otro concepto, no podrían volver a serle proporcionados con el propósito de facilitar o contribuir a la fuga", concluyó el magistrado, volviendo a poner el foco en su hijo, el primero que acudió a visitarle a Soto del Real el pasado viernes. En el caso de Colombia, cabe destacar, además, que los viajes de la familia a dicho país eran recurrentes, tal y como desveló Libertad Digital.
Pisos y petróleo
Al margen de lo que hemos conocido en los últimos informes de la UCO, el nombre de Víctor Ábalos ya ha aparecido en otras ramificaciones de la trama. Para empezar, él fue el que gestionó para su padre el alquiler con opción a compra del famoso piso de la Castellana valorado en 1,9 millones de euros, como una especie de fiducia de garantía: si no llegaba a cobrar las mordidas acordadas por los presuntos amaños en la adjudicación de obra pública, se quedaría con el inmueble, tal y como desveló Aldama.
Además, su nombre también estaría involucrado en los negocios de petróleo venezolano. No en vano, tal y como destapó The Objective, el 5 de abril de 2024, un empresario envió a la casa que Ábalos tenía en la calle Humilladero de Madrid un aviso para su hijo: "Asunto Petróleo Venezolano para cliente de China. Me urge contactar con usted". Se da la circunstancia de que Víctor Ábalos tiene domiciliadas en ese inmueble dos de sus sociedades: Proyectos y Desarrollos Constructivos Especiales S.L. y External Programes Consulting S.L. la empresa que habría realizado pagos durante años al que fuera número 2 del PSOE. Fuentes de su entorno revelaron entonces que, en realidad, ambas compañías eran del hoy encarcelado y que las seguía manejando en la sombra.
Ahora, la gran cantidad de líneas de investigación que apuntan a su hijo podría hacer que el exministro buscase algún acuerdo con la Fiscalía para que se le dejara al margen, a cambio de revelar algún tipo de información desconocida hasta el momento ; información que podría apuntar al mismísimo presidente del Gobierno.

