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Bajo un cenador en Moncloa estaban Zapatero, Solbes y Sebastián

El presidente Rodríguez Zapatero ha hecho sus cálculos sobre la crisis. Esta escena, según nos ha contado un mirlo, sucedía antes de ayer, en los jardines de Moncloa, bajo un cenador que se ha hecho instalar el hombre que tiene todas las tardes libres para recibir a sus amiguetes y a sus "brujos visitadores". Eran tres: dos ministros, Solbes, de Economía, y Miguel ¿qué? Sebastián, de Industria, y el propio presidente.

-Presidente, ya te dije que no funcionaría lo de aparecer en televisión para dormir a la gente, diciendo que sólo debían escuchar tu voz. ¿Cómo se te ocurrió que a los parados podrías convencerlos de que no los habían echado del trabajo sólo asegurándoles eso de  "se sienten muy, muy relajados, sus miembros les pesan, les pesan enormemente, y no, no hay ninguna crisis, repita lo que dice mi voz, no siente usted ningunas ganas de ganar dinero porque las ansias infinitas de paz alimentan lo suficiente"? -le recrimina, algo irritado, Solbes a Zapatero-

-Pues yo me he desayunado esta mañana con un par de supuestos para aplicar la eutanasia libre en el futuro y ya no tengo hambre intelectual para todo el día... -dice Sebastián, siempre dispuesto a salvarle la cara a su jefe y a hacerle la pelota-.

-Zapatero, removiéndose incómodo: Bueno, dejáos ya de trabajar. ¿Hemos venido aquí a intoxicar, o no? Pues entonces dejaos de coñas. Mi estrategia de negar lo evidente era buena. Pero los capullos de nuestra televisión, que son todas, cortaron para los anuncios justo cuando mis ojos estaban a punto de convencer a las clases productivas, que son por definición las que no nos votan ni lo harán,  de que la crisis dará más felicidad al conjunto del pluralismo, porque "la felicidad consiste en limitarse" y no tener para pan ese día, como dijo el conejito Tambor...

-Ejem, Goethe -susurra Solbes-.

-¿Qué? 

-Que lo de la felicidad a través de la renuncia no lo dijo ningún conejito colega de Bambi, sino el pensador alemán Goethe.

-Pero, ¿no les habíamos ganado la eurocopa?  ¿Qué hacen los alemanes opinando encima?  Bueno, pues aunque lo digan los alemanes eso de conformarse está muy bien traído, porque nos conviene. Ya tengo la consigna, escuchad.

-Ando duro de un oído, un ojo no lo tengo muy bien, y además no tengo ganas de nada, pero como te empeñaste en que siguiera cobrando de ministro cuando lo que yo quería era irme a mi pueblo a comer paellas de un grano con conejo y caracoles... -se queja Solbes-

-Ya veo que contigo no puedo contar para nada, siempre estás cansado. Menos mal que siempre me queda Miguel. La consigna, como os decía: la economía capitalista es insostenible, y, valiéndonos de los aspectos positivos de este crisis, debemos ir hacia una pobreza de dimensión humana. Repítelo por ahí las suficientes veces. ¿Véis que pronto acabo yo con las crisis?

-Presidente, eres un tío. ¡Qué idea, la de convencer a la gente que con los buenos sentimientos sí se come!

-Tengo mis momentos. Y ahora, esperad que llamó a mis cincuenta pinches del personal de cocina de Palacio a que nos preparen algo ligero, que no quiero que os vayáis así... 

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comentarios
1 opq5, día

Siguiendo en el mismo plan de de los blogueros, la sensación que a veces puede dar, es de quienes dicen que nos gobiernan, a lo mejor lo que les gustaría es que se agudizase, poe

2 opq5, día

...se agudizase porque no hay mente mas receptiva que la de la persona que no está bien comida pues su mente es de mas fácil dominar sea por consignas o por mantras. A veces pienso porque será que los regimenes comunistas o populistas o indigenistas lo primero que hacen al llegar al poder es "arruinar" a la población. ¿Porqué será?