“España en comunidad” es el bienintencionado título de un programa recién estrenado en “La 2” de TVE que trata de informar sobre las distintas comunidades autónomas en un medio de cobertura nacional. Sin embargo, como ya se sabe que hay una pequeña confusión en TVE sobre información y propaganda, en vez de acercarse y acercar a los espectadores a la realidad cultural o social de las distintas regiones, han orquestado una sinfonía de “autobombos” institucionales que resulta sonrojante.
En la media hora que dura el programa ponen dos reportajes de diez minutos sobre algún virtuoso proyecto institucional y después sirven un bloque de noticias en el que no siempre sale el político de turno. En el primer programa vimos como se arruinaban dos temas de interés general por el planteamiento tan absolutamente oficialista de los reportajes. La recuperación de la Cartagena romana y visigótica, que puede ser magnífica, tuvo a la alcaldesa como protagonista principal y los pobres monumentos como material de relleno. Tampoco se quedó atrás en el segundo reportaje, dedicado a la autovía del Cantábrico, el presidente de Cantabria, Joaquín Martínez Sieso, que peroró sobre lo positivo —del proyecto viario. En las noticias breves, sólo fue negativo el tiempo en Valladolid.
El jefe del Área de Centros regionales de TVE dice que quiere potenciarlos, y se supone que para ello tienen que hacerle el caldo gordo a los políticos del lugar. Esto hasta puede ser comprensible, pero, para no confundir al espectador, deberían hacer una galería de retratos de políticos que quieran ponerse en la órbita nacional, sin necesidad de relleno. Si no es así, más vale que el bombo lo combinen con otros instrumentos que suenen más fino y que la guionista, Nuria Ramos, no vuelva a decir que éste “es un programa que vertebra un concepto de España”. Es mucha frase para media hora de propaganda mal cosida.
En Sociedad
0
comentarios
Servicios
- Radarbot
- Libro