
La influencer y actriz Yoon Ji-ah, de 25 años, fue hallada muerta el pasado 11 de septiembre en el condado de Muju, en la provincia surcoreana de Jeolla del Norte. El cuerpo apareció en el interior de una maleta abandonada en una ladera montañosa, una zona con la que no tenía ningún vínculo personal ni familiar, según confirmaron las autoridades.
La autopsia reveló que la joven falleció por asfixia tras una compresión en el cuello. El informe policial señala que el ataque se produjo alrededor de treinta minutos después de que finalizara una retransmisión en directo en TikTok desde la isla de Yeongjong, en Incheon, a más de tres horas del lugar donde se encontró el cadáver. Cámaras de seguridad registraron cómo, minutos después de ese directo, la víctima intentó salir de un vehículo, pero la puerta fue cerrada desde el interior.
@yoonjia102 An eventful August has passed🌉 I'm a little nervous and excited about what will happen in September. Let's stay healthy and happy together Love ya 🥐 family 🥰
♬ Talking to the Moon - Bruno Mars
La doble vida del sospechoso
El principal sospechoso es un hombre identificado como Choi, de unos 50 años, que mantenía una relación profesional con la influencer. Se presentó ante ella como director ejecutivo de una empresa de informática y prometió apoyarla en el crecimiento de su carrera digital. En las plataformas de retransmisiones era conocido como El gato negro y figuraba como donante destacado, llegando a realizar aportaciones elevadas en los directos. Sin embargo, las investigaciones revelaron que se encontraba en una situación económica crítica, con deudas y su vivienda embargada.
La ruptura como desencadenante
Según las pesquisas, Yoon Ji-ah había tratado de cortar la relación con él poco antes del crimen. Grabaciones de cámaras de seguridad muestran a Choi arrodillado frente a la joven, suplicándole que no se distanciara. Testigos también declararon haberlo visto con una gran maleta en la zona montañosa donde finalmente fue hallado el cuerpo.
El 11 de septiembre, tras la retransmisión en directo, el sospechoso transportó la maleta hasta Muju, realizando varias paradas para despistar a los investigadores. Fue detenido 12 horas después del hallazgo. En un primer momento negó su implicación, pero terminó confesando ante las pruebas.

