Pues si en la privada se gana mucho más dinero, no entiendo entonces por qué no abandonan la función pública.

Sin embargo yo veo que todo el que puede abandona el sector privado para irse al público y no al revés (por algo será digo yo).

Todavía no he visto el caso de que se oferte empleo público y queden las vacantes desiertas. Este año para unas 200 plazas de guardias civiles se presentaron 25000 aspirantes. Es decir, muchos desearían para sí mismos las malas condiciones laborales que denuncian otros.

Y respecto a la dureza de las oposiciones, viene marcada por la cantidad de candidatos. Sacar una plaza para la policía local es dificilísimo hoy en día, pero también conozco a policías locales de más de 40 años que cuando entraron había 17 plazas libres y 13 aspirantes y todavía a uno tuvieron que mandarlo para casa porque no había por donde cogerlo. Eran otros tiempos.

Rechazo la idea de que por aprobar una oposición se contraigan derechos vitalicios.

Una lanza a favor de los funcionarios: hay empleos que deben ser públicos porque realizan una labor social y no pueden estar sujetos a parámetros productivos aunque no nos guste. Siempre que no haya dejadez de funciones o actitudes delictivas: ¿Cómo se puede evaluar el desempeño de un juez o de un catedrático?; Además hay funcionarios con una dedicación envidiable y deben ser independientes del gobierno y esta propuesta podría provocar "clientelismo" en las administraciones. No me huele demasiado bien. Habría que ver cómo quieren articularla.

Lo mejor será poner algunos ejemplos...vamos a ver si así se ve más clarito:

Pongamos un Inspector de Hacienda. Llega el político en el poder y le dice, "creo que habría que presionar un poco a esta empresa, que se resiste a pagar al partido la comisión...".

O bien, ese Juez al que le toca echar un vistazo (en un juicio, se entiende) a un "presunto cohecho" de un compi del partido en el poder.

O a un Interventor, que debe velar por el buen uso de los fondos públicos....

Todos estos funcionarios y otros muchos más, tienen que elegir entre su independencia, y la ávida mirada de sus vástagos al llegar a casa. Osea, que mejor hacer lo que el político dice y manda, por miedo a que les pongan en la calle.

Que son funcionarios, no héroes.

Porque, en realidad, la inamovilidad de los funcionarios, es una garantía democrática. Y cuánto más tengan que decir los políticos en el acceso y designación de puestos de la Administración Pública, pues mira, mucho peor.

A mi no me gustaría nada vivir en un país así. Seguro que cuando llamaran a casa a las seis de la mañana, no iba a ser el lechero.

Bueno, yo, no soy funcionaria pero sé lo mucho que hay que estar preparado para llevarte una plaza.

Los políticos hacen y deshacen.

¿Por qué no suprimir eso sueldos millonarios a todos los políticos que por el hecho de haber llegado a Diputado les quedan vitalicios?... Y, además, CON CARÁCTER RETROACTIVO.

QUE SE EMPIECE POR AQUÍ. SUPRESIÓN DE SUELDOS MILLONARIOS A TODOS LOS POLÍTICOS CON CARÁCTER RETROACTIVO, YA.

Y que además, SEA INCOMPATIBLE UN SUELDO DEL ERARIO, CON UNO DE LA EMPRESA PRIVADA.

Por aquí, podemos todos empezar.

ESTOS EXPERIMENTOS SEÑORES POLÍTICOS, HAY QUE EMPEZARLOS EN PROPIAS CARNES.

Leyendo a los señores de la privada, da la sensación de que para ellos estudiar en España es una prueba de torpeza. Cuanto más estudias menos vales. Los analfabetos al poder, debe ser su lema- como zapatero, vamos-.

Yo sólo veo que en las grandes corporaciones privadas se busca para sus puestos directivos a funcionarios de los mejores cuerpos de la Administración ( y de vez en cuando al sobrino tonto del dueño al que hay que colocar) Pero normalmente, si la empresa sus directivos no pertenecen en exclusiva a personas que siempre han trabajado en la privada sino que muchos son reclutados entre los miembros de los grandes cuerpos de la Administración- por algo será-.

Los grandes despachos de abogados llenan sus filas entre los opositores que suspendieron algunos consiguen ser socios tras muchos años de esfuerzo y dedicación, pero una buena parte de los socios son reclutados directamente desde los grandes cuerpos de la Administración. Muchas de las consultas médicas privadas a las que seguro gustan de ir los señores que tanto denigran a los funcionarios las regentan médicos que se han hartado de que la Seguridad Social los maltrate. Pero esos médicos son funcionarios en excedencia. Y muchos de esos señores de la privada, cuando tienen una enfermedad grave- bien sabe Dios que no se lo deseo a nadie- van a los grandes hospitales públicos a que los médicos, funcionarios de la Seguridad social, les atiendan. Podría poner más ejemplos, hasta aburrirnos

Y todo eso, porque normalmente los funcionarios estamos muy bien formados, porque nos mantenemos al día, porque hemos estudiado y seguimos estudiando. No desprecien ustedes, señores de la privada, el conocimiento que nace de muchas horas de estudio. Parecen ustedes Montilla, Corbacho o Pepiño. Parece que defienden ustedes lo que un comentarista brillante de esta casa ha llamado la rebelión de los mediocres

Pues qué quieren que les diga. Creo que la solución no consiste en que el funcionario pierda su carácter vitalicio sino en que el acceso a tal condición quede restringido exclusivamente a una oposición con unos tribunales en los que los políticos no puedan meter la mano.

Un funcionario que sepa que su espada de Damocles la blande el régimen de turno, llegado el caso de que los intereses de su "señor" y del administrado entren en conflicto, ya se cuidará mucho de servir antes a su "señor" que al administrado, no vaya a ser que lo incluyan en la siguiente remesa de los prescindibles. Y no crean que para ello hace falta vulnerar una ley: basta con que te pongan las cosas difíciles para que desistas de ejercer un derecho. Alguno de los que se las haya tenido tiesas con un inspector de la Agencia Tributaria sabe de lo que hablo.

Cosa distinta es la productividad que a cualquier trabajador --funcionario, panadero o sastre-- se le deba exigir.

En la administración, cuando la oposición es totalmente externa (no hay puntos por haber trabajado antes en la Admon, ni por "cursos", ni por enchufismo), entran los mejores. Las oposiciones es lo más "capitalista" y "liberal" que haya existido. Gana el mejor, el más listo y que más se lo ha currado. Es decir, se premian conocimientos y capacidad en términos de plena igualdad.

Por cierto, para los muchos ignorantes que hablan por aquí. El funcionariado está regulado y esta prohibido que un funcionario haga "dejación de funciones" o trate mal al público. El problema es que los superiores no aplican el reglamento, porque ellos a su vez no son controlados. Es un problema de fondo de moral y de justicia, no de leyes. Las leyes están ahí, pero no se aplican porque hay una absoluta falta de mano dura con los caraduras, empezando desde arriba. No hay un verdadero respaldo del sistema contra los funcionarios parásitos que no cumplen con sus cometidos laborales.

La misma caradura se aplica a las bajas laborales, que también suceden en la empresa privada (ahora con la crisis, por arte de magia nadie quiere darse de baja). ¿Por qué se firman bajas laborales más que dudosas? Porque los médicos no tienen respaldo alguno del sistema, sino que el sistema apoya y respalda el engaño y la vagancia. El médico sirve a un sistema que no le proteje.

Los jefes de la administración son políticos. Sería propio de un sistema bananero dejar en manos de los políticos de la catadura moral de este país un puesto de trabajo ganado a pulso mediante oposición. El sistema de la empresa privada puede funcionar en otros países que tuvieran una justicia que funcionara porque las leyes se aplican.

Estamos hablando de España, señores. Un poquito de seriedad.

Como se nota que los de la privada no tienen idea de lo que es el trabajo en la Administración ¿Pero quién dice que nosotros no tengamos que reciclarnos todos los días ? ¿Quién dice que no tenemos que superarnos y competir con otros que con preparación semejante pueden ocupar nuestros puestos? ¿Pero de qué hablan estos señores de la privada que no saben de la misa a la media cómo es nuestro trabajo, nuestra manera de promocionarnos y de conservar el puesto? Hablo del puesto de trabajo, no de la condición de funcionario. Hablan sin saber. Si tan poco importante les parece superar los temarios y las pruebas que se presenten y luego hablamos. Aquí desde el puesto privado en el que se gana una pasta porque un día un amigo de papá te enchufó para entrar se habla con mucha ligereza y se dicen muchos sinsentidos. Cuando sepan como funciona la Administración que vengan a decirnos si lo que estudiamos no vale para el puesto; si el ejercicio de la Función Pública no es acaso una profesión como tantas otras que requiere conocimientos, oficio, y capacidad. Nosotros, con esas capacidades demostradas en pruebas con libre concurrencia, con mérito y capacidad. Los de la privada está por demostrar esa gran capacidad, en la mayor parte de los casos. ¿Es que los trabajadores de un banco tienen que reciclarse más que nosotros? ¿Acaso los abogados de un bufete tienen que conocer las leyes mejor que nosotros? ¿ Es que los responsables de Recursos Humanos de cualquier empresa deben conocer mejor la legislación de laboral que los de la Administración – sí, laboral, porque en la Administración además del conocimiento de la legislación de Función Pública hay personal laboral contratado en régimen laboral como cualquier empresa-?¿Pero de qué están hablando?

Además en la Administración como digo hay personal laboral que trabaja en régimen común, y no son precisamente los mejores. Señores de la privada, menos envidia y un poco más de sentido común. Que los celos no les dejan ver la luz tras el bosque

Los que dicen que hicieron oposiciones para entrar en la empresa privada no saben lo que es una oposición. Lo de la privada es una pruebecita, o una entrevista, como mucho. Las oposiciones son temarios larguísimos; con pruebas de idiomas, algunos; pruebas de contabilidad pública y privada, otros; con casos prácticos complicadísimos; con exámenes orales. Son horas y horas de estudio durante años, sin saber si vas a aprobar o no. Porque no vale sólo con estudiar o hacer un buen ejercicio, hay que superar a los demás que han estudiado tanto como tú.

A ver quién en la privada ha tenido que estudiar más de 200 temas, un idioma, superar cuatro exámenes que se leen o contestan en sesiones públicas para conseguir una plaza entre 50 convocada, compitiendo con más de 3000 personas. Eso lo hice yo para superar una oposición durísima del grupo A1 del Estado. A ver quién en la privada ha superado una prueba así. A ver quien en la privada tiene responsabilidad penal en todo lo que firma como lo tengo yo y la mayoría de mis compañeros de Cuerpo. Y ahora todos esos que, como ha dicho alguien, gana en las épocas de vacas gordas e incluso ahora tres veces más que yo puede tener el valor de venir a decirme que ha superado una oposición para entrar en la privada. A ver quién es el guapo, de la privada, que me dice que tras todo eso no tenemos derecho a mantener la inmovilidad y a aguantar que nos eche a la calle el primer politiquillo de turno. La mayoría de ellos, sin oficio ni estudio conocido, que esa es otra. Nuestro futuro profesional se juzgará cada poco por señores que, en ocasiones, no tienen ni carrera superior.
¿Y esto es una buena noticia? Los que dicen eso no saben en que manos está España.

Nada, nada Sres. Funcionarios, no me convenzen, deben ustedes de aplicarse el cuento y empezar a pensar de otra manera. Yo mismo, tuve que estudiar una carrera,hacer muchos examenes, muchos folios, mi trayectoria profesional me la he labrado con mucho trabajo y estudio y formacion continua(y digo continua) , en el sector privado, o espabilas y estas a la última, o malo. Asi que no me vengan que por el mero hecho de aprobar una oposicion(a lo cual, no le quito ningun merito) ya se han ganado un derecho vitalicio, anda ya, yo en mi trabajo oposito mes a mes, proyecto a proyecto, resultado a resultado, y pienso que asi deberia de ser para todos.
Un saludo.

Por cierto, y en relación con la reiterada cantinela que tenemos que oír de los profesionales del funcionariado respecto a las durísima oposición que tuvieron que preparar y/o a los 3000 folios que tuvieron que aprenderse de memoria para acceder a su trabajo, decirles que ese argumento es una soberana estupidez.

De los 3000 folios mencionados, 2990 no tienen absolutamente nada que ver con el trabajo en cuestión, o se supone que el candidato ya los lleva "puetos". Por ejemplo, si se decide que para optar a una determinada plaza hace falta ser Químico, o Ingeniero Industrial o Abogado.

Todos los días se cubren plazas en la empresa privada para puestos tanto o más difíciles y especializados que en la gestión pública sin que los candidatos tengan que pasar oposiciones y sin que se caiga el mundo.

Respecto al sueldo, el asunto es que cada cual sería libre de aceptarlo o no. Por ejemplo, esos listísimos Abogados del Estado que deberían ganar un Potosí por ser tan listos y por haber sacado unas oposiciones tan difíciles, podrían ser sustituidos por abogados externos o internos sin tanta gaita y contemplación. Como por ejemplo, hacen los Bancos o las Compañías de Seguros para defender sus intereses. Así que por favor, menos lobos, Caperucitos.