Otra vez el divorcio de Belén Esteban. Parece que en este país la única que pasa por ese trance es la de San Blas. Otra vez la lágrima fácil, cuando no son pitos, son flautas: lágrimas porque le sale mal el baile, ahora por el divorcio… Obviamente esto es un tema mucho más serio pero en ella ya no te lo tomas como debe ser. No me extrañaría nada que dentro de unos dias se vuelva a arrepentir y dé marcha atrás. La verdad es que uno pierde la confianza, sobre todo cuando la lucha por las audiencias es feroz y da la casulidad de que después de haber firmado el dichoso divorcio Belén lo anuncia el mismo día en que en Antena 3 da comienzo un nuevo programa.
Como siempre, y así nos tiene acostumbrados, su marido mantiene la boca cerrada al menos hasta el día de hoy. No lo hace por falta de ofertas: de todos los programas le han llamado para que fuese a una entrevista y Fran siempre lo ha rechazado.
No entiendo cómo un matrimonio se divorcia estando tan enamorados como dice la susodicha. Los motivos no los cuenta y dice que no piensa revelarlos. ¿Cuántos días tardará en soltarlo todo? Ya se especula con la posibilidad de que pueda haber una tercera persona de por medio aunque ella lo ha negado. A Fran se le ha visto como siempre, discreto, trabajando en su bar, rodeado de su gente y con una cara estupenda. Por el contrario, la Esteban dijo que su familia y su hija lo sabían pero que estuvieran atentos al programa que “co –presenta” ¿Qué nos venderá mañana?
Nadie había llorado más desde “La casa de la pradera”. En Tele 5 ya tienen a la dueña de la casa de San Blas y cientos de periodistas peregrinando al portal de Belén. ¿Alguien da más? Un poco de seriedad no estaría nada mal, sobre todo porque la gente ya empieza a estar cansada. ¿Como estarán en “Ambiciones”? No me lo puedo ni imaginar.