
Bosques, montañas, costas y mar. Son los ingredientes principales que hacen del norte de España uno de los lugares más reconocidos mundialmente, por su belleza y por su gastronomía. Por eso, Virrey apuesta por el mejor producto, con una degustación de pescados y mariscos, verduras de temporada de la huerta y las mejores carnes. Todo pensado con la intención de convertirse en la referencia en la capital de los amantes de la cocina del norte.
Ubicado en el número 8 de la calle de Zurbarán, cuenta con cuatro espacios diferenciados perfectos para cada situación y para que el comensal disfrute de una grata experiencia gastronómica. Un salón con mesas bajas, mesas altas y una barra perfecta para los aperitivos y un picoteo informal. Además, una estupenda terraza para disfrutar del buen tiempo y del aire libre y un exclusivo reservado para 8-10 personas que invita a dejarse llevar por las recomendaciones y propuestas del chef Carlos Fernández Miranda, quien te atenderá directamente gracias a su cercanía con la cocina.
Un espacio que desprende elegancia y sofisticación gracias a diferentes tonalidades de verde oscuro, maderas y los manteles blancos que visten todas sus mesas. El estudio Mesonero Romanos ha diseñado todos estos espacios, así como la entrada del restaurante, un local que invita a disfrutar y contemplar su barra y vitrina, llena de los pescados y mariscos del día y el mejor producto fresco.
Perfectamente asesorado por Sebastián, su director, puedes comenzar con jamón ibérico de bellota de Los Pedroches, ensaladilla rusa clásica o acompañada a gusto del cliente de ventresca de bonito en conserva o lubina en aceite de Doña Tomasa, o anchoas de Santoña con pan con tomate, boquerones en vinagre o el matrimonio que casa la anchoa y el boquerón. Por no hablar de su gilda XXL (7,5€), que se aleja de la clásica y está compuesta por aceituna, anchoa, piparra, tomate seco, bacalao, boquerón y atún rojo. Una delicia que debería llamarse Rita, por Rita Hayworth, actriz que encarnó a Gilda en la película del mismo nombre.
El marisco, como no podía ser de otra forma, también tiene mucho protagonismo en la cocina de Fernández Miranda con bígaros, gamba roja de Garrucha, zamburiñas, almejas de Carril, muy buenas ostras gallegas (5,5€) y espectaculares gambas blancas de Huelva (18€). También probamos las ricas huevas de atún rojo de almadraba (15€), con aceite de oliva virgen extra y almendras fritas.
Esta cocina del norte la ejecuta el chef asturiano Carlos Fernández Miranda. Con el saber hacer de la escuela de cocina de Gijón y sus años de experiencia en diferentes restaurantes con chefs de renombre como Paco Roncero, es el encargado de transmitir la esencia y sabor de su tierra y otros grandes destinos gastronómicos de la parte más septentrional de España.
La bodega de Virrey tiene una cuidada selección de vinos del norte y también se ofrecen referencias por copas y botellas que combinan clásicos con denominaciones de origen, así como una selección de generosos y espumosos. Nos sirven un buen vino blanco Cucú de la Bodega Barco del Corneta (23€), mientras seguimos disfrutando de unos deliciosos buñuelos de brandada de bacalao (15€), con un gran sabor y un rebozado muy ligero para que el bocado no se haga nada pesado.
Los pescados salvajes de anzuelo son otro de los puntos fuertes del restaurante, pero el rey de la casa y que da nombre al restaurantes es el virrey asado al horno con una exquisita salsa y patatas (precio según mercado, el de hoy 80€/kg). Te lo presentan en la mesa y después lo emplatan para disfrutar de un gran producto.
También te emplatan las distintas partes de la cabeza perfectamente limpias para ir comiendo por partes. Empiezas por el mormo y el contramormo, que son las dos cavidades que tiene detrás de la cabeza. Después la ijada, que es el músculo más fuerte del pescado y unión entre las dos aletas laterales. Al lado está el músculo que mueve la aleta. Luego tienes la ventresca, que es algo más amarga; la carrillera, que es la parte de debajo del ojo; y para terminar el paladar del virrey y la cococha.
De postres como el milhojas de crema y nata, el pastel de tres leches cántabras, las natillas caseras, el arroz con leche caramelizado o la leche merengada helada nos decantamos por una muy buena y cremosa tarta de queso al horno(8€).
Virrey, con un ticket medio de unos 50€, es el restaurante perfecto para un picoteo informal en la barra o en sus mesas altas o para una comida con amigos o familia. También es idóneo para una cena más íntima o para una ocasión especial en su reservado.
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