
El verano ya está aquí y con él los mejores planes y destinos para disfrutar de unas veladas para recordar. Zuma Ibiza es uno de esos destinos al que todo visitante de la isla quiere ir. Ya sea por el ambiente, por su cocina o por la ubicación ya que está situado en la azotea de Ibiza Gran Hotel y tiene una de las mejores vistas al puerto deportivo y a Dalt Vila.

Un restaurante amplio, casi entero a cielo descubierto y con tres zonas para disfrutar de su cocina, ya sea en los salones, junto a la robata grill o en su espectacular terraza. De hecho, el espacio está inspirado en los cuatro elementos —tierra, fuego, aire y agua—, se estructura en torno a una vibrante cocina abierta y una imponente barra de cócteles. Todo ello enmarcado por los tonos azules del puerto y el mar, creando un entorno ideal para vivir las mejores puestas de sol de Ibiza. Cuando cae la noche, el ambiente se transforma y la experiencia continúa con sesiones de DJ en directo que acompañan el ritmo de la velada.

Acompañados de una botella de un estupendo vino tinto Habla Nº 24 (80€) empezamos a saborear los platos que llegan desde la cocina tras el aperitivo de edamame. En una carta que combina la tradición culinaria japonesa con un toque moderno, lo primero que probamos es un muy buen tiradito de pez limón con ajo confitado y salsa ponzu (36€), perfecto para dar paso a la tempura de gambas (24€) con tenkasu, gobo encurtido y salsa de wasabi mentaiko, un bocado demasiado extendido por los restaurantes asiáticos y que tampoco es ninguna delicia, aunque se aprecie el buen sabor del producto que emplean en todos sus platos.

De la parte del raw bar llega un surtido de sushi. Fantástico el niguiri de atún, también rico el niguiri lubina y más sencillo el niguiri de salmón. También simple el roll de salmón con aguacate y mucho mejor el spicy tuna con chilimayo, un muy buen final para esta bandeja que también destaca por su presentación.
Los exclusivos de Zuma
Además de la propuesta gastronómica a la carta, en Zuma Ibiza puedes optar por sus exclusivos menús degustación omakase y sólo disponibles para la mesa entera. Desde el firma (180€) al de lujo (375€), el intermedio es el menú premium (240€).

Pero si tu opción es seguir a la carta hay platos especiales como el tataki japonés de wagyu con ponzu de trufa y trufa fresca, el sushi tartar de wagyu con trufa fresca o el tártaro de chu toro con pan de miso y trufa negra y con la opción de añadirle caviar de oscietra o de beluga.
También hay platos de autor como la langosta asada con chile verde y mantequilla de shiso de ajo o el pollo bebé marinado en miso de cebada, asado sobre madera de cedro. En nuestro caso probamos un buen bacalao negro marinado envuelto en hojas de hoba (58€) con salsa cítrica de wasabi. Eso sí, nada tiene que ver con el bacalao que conocemos, ni por textura ni por sabor, pero el marinado y el toque ahumado le da un sabor delicioso.

También bueno el solomillo de ternera picante (56€), servido con salsa de sésamo, chile rojo y soja dulce y una rica guarnición de setas ostra a la robata con ajo y mantequilla de soja (17€).
Además de una amplia carta de vinos entre la que te puede asesorar su sumiller, también tienes la opción de empezar, acompañar o terminar la velada con sus cócteles, ya sean de autor o tradicionales, además de otro par de ellos sin alcohol.

Los postres también los cuidan mucho en Zuma Ibiza y nosotros acabamos con un buen y refrescante chawan mushi de frutas exóticas (15€), elaborado en tres capas, al fondo la galleta de rollo de huevo, otra encima de crema de coco y coronado por una espuma de mango y papaya.
Por cuarta temporada, Zuma Ibiza ofrece una experiencia completa en uno de esos locales pensados para ver y ser vistos en una isla que lo tiene todo para el disfrute y la relajación con un ticket medio de más de 120€.
Me puedes seguir también en mi Instagram si no te quieres perder ninguna de mis recomendaciones.