... por eso voy a escribirte, cuando recibas mi carta, mándame un beso desde tu mundo de estrellas.
Mi amor te imagino de viaje, un viaje largo hacia el cielo... pero se te olvido aquí en la mesilla el móvil, y los bolígrafos... Sé por ello que no puedes contestarme, sé que no puedo llamarte, pero también sé que estás bien, que estás haciendo realidad tu sueño, ese sueño que soñabas en silencio, ese sueño que llenaba tus noches, ese sueño que no compartiste con nadie, ese sueño que yo siempre he soñado sin tu saberlo, porque soy tu madre, y una madre lleva a su hijo en el alma, por eso, mi vida, sabía cuál era tu sueño, y por eso siempre estaré alegre de saber que lo alcanzaste.
Mi amor, qué placeres tan hermosos te ofrece el cielo, qué maravillosos parajes retienen tu espíritu, qué vista infinita alcanzan tus ojos.
Con tanto gozo en tu corazón no sé si llegaras a tiempo para estar con nosotros estas Navidades... seguro que estar no estarás, seguirás viajando por esos mundos celestiales, pero si tengo que decirte, sin que ello te apene, que van a ser las Navidades más tristes de mi vida... que no serán Navidades, serán unos dias de ese calendario que hay que pasar... Cómo vivir esos dias sin tu presencia, cómo soportar ver tu silla vacía en la mesa, para quién llenar el plato de Papa Noel, quién se despertará a media noche con toda la ilusion del mundo para abrir los regalos, dónde irá a parar mi primer beso del año...
Solo te pido, cielo mío, que hagas un viaje fugaz hasta mi almohada, deja en ella tu aroma , susúrrame al oido "te quiero mama", besa mi mejilla, y sigue volando con tus blancas alas. Viaja, mi ÁNGEL, y el dia que pases cerquita de casa, entra... coge mi mano y llévame contigo a disfrutar de tu viaje, yo siempre tendré las maletas preparadas para tu llegada.
Isabel