Presentimientos es un thriller romántico que en palabras del director trata de mantener "confuso" al espectador durante la primera parte de su metraje. Tabernero cuenta que la película "tiene dos niveles de relato: el de la realidad y el de la mente" algo que supone un reto para el espectador.
Santiago Tabernero nos la define como "una gran historia de amor". Trata de "dos personajes perdidos que intentan reencontrarse desesperadamente. En esa búsqueda del uno hacia el otro aparecen nuevas informaciones que desconocían y les obligan a posicionarse".
Marta Etura da vida a Julia, un personaje complicado que supone un gran reto para la actriz: "Por una parte es un reto interpretativo y por otra parte asusta porque es complejo al desarrollarse en ese plano onírico. Es la primera vez que leía un personaje y a veces me caía mal y de repente me generaba riqueza al ser un personaje lleno de contradicciones". Tabernero cree que Marta ha realizado un trabajo "exhaustivo" y que es "emocionante" ver como en pequeños detalles la actriz ha conseguido llegar "al fondo de la expresividad".
Eduardo Noriega se entrena en Presentimientos como guionista, tarea que ha compaginado con el de protagonista de la cinta. El actor afirma no haberse "obsesionado con el personaje". Durante el rodaje sentía que era "un actor más" y que el reto del personaje residía en interpretar a una persona "gris" y con el que "no se empatiza desde el principio. Conquista poco a poco al espectador".
'Presentimientos' nos cuenta la relación de Julia y Félix, una joven pareja de clase media, atraviesa un momento delicado. Para intentar arreglar su relación decide irse unos días de vacaciones a la playa. Cuando llegan a su destino no tardan en aparecer las discusiones y Julia decide volver a su casa. Tras oír el violento estruendo de un accidente, se detiene y sale para ver qué ha pasado. Al volver al coche, descubre que le han robado el bolso. Por si fuera poco, no encuentra el camino de la urbanización. Empieza así el angustioso deambular de Julia y Félix buscándose mutuamente en un paraje desconocido.