L D (Guillermo Domínguez) Increíble primera temporada de Pep Guardiola al frente del Barça. El año pasado, por estas mismas fechas, el técnico de Santpedor entrenaba al filial Barcelona Atlétic. Y ahora, un 27 de mayo de 2009, puede presumir de haber conseguido el triplete en el año del debut. Es el Barça el quinto equipo de la historia que lo consigue tras el Celtic de Glasgow (1967), Ajax (1972), PSV Eindhoven (1988) y Manchester United (1999). Y casi se puede afirmar con rotundidad que estamos ante el mejor Barcelona de todos los tiempos. En una noche redonda, el equipo catalán ha sido fiel a sí mismo, desplegando el fútbol que ha enamorado a la afición a lo largo de todo el curso, para entrar en la historia con letras de oro.
Y eso que el Manchester United empezó mejor sobre el césped del Olímpico de Roma. El conjunto británico, con un hipermotivado Cristiano Ronaldo a la cabeza y que disparaba todo el balón que le llegaba a sus pies, empezó asediando la portería de Víctor Valdés. Lo pasaba mal la defensa azulgrana, que sufrió ya el primer susto al primer minuto de partido. Fue en una falta directa en la misma frontal del área, con un lanzamiento de Ronaldo que a punto estuvo de sorprender al portero barcelonista. El Barça estaba ahogado, demostrando que es un equipo que sufre cuando no tiene el balón.
Apenas había noticias de los azulgrana, hasta que apareció el exquisito Andrés Iniesta. Se cumplían los nueve minutos cuando el albaceteño generó dudas entre la defensa inglesa. Le puso un balón perfecto a Samuel Eto'o, que recortó a Vidic para plantarse prácticamente solo ante Edwin van der Sar, pese a la estéril oposición de Michael Carrick, y conseguir el 1-0 con un disparo cruzado.
Cambiaron entonces las tornas de lo lindo en Roma y el partido dio un inesperado giro de 180 grados. De dominador a dominado. El Manchester United se vino abajo con el gol en contra. A pesar de que a los azulgrana se les veía descoordinados en defensa y que Cristiano Ronaldo era un peligro constante, los 'diablos rojos' sufrían y sufrían. A partir de entonces, el Barça minimizó la presencia de CR7 con una receta que no tiene admite respuesta: la posesión del balón. Y así fue creciendo el juego de los azulgrana. Xavi e Iniesta aparecían cada vez más y Messi se situó entre Ferdinand y Vidic para generar un auténtico quebradero de cabeza. Pep Guardiola empezaba a ganarle la partida al gran maestro, Sir Alex Ferguson.
La 'Pulga' tuvo el 2-0 a los 19 minutos en un remate por encima del travesaño de Van der Sar, que esta noche se mostró como un portero demasiado nervioso. Xavi también tuvo su ocasión (m.26) en un lanzamiento directo de falta que buscaba la escuadra del meta holandés. El triple campeón de Eurpa no encontraba respuestas ante el fútbol del Barça. En cuanto se acabó el factor sorpresa de los primeros minutos, los ingleses parecieron perdidos.
El Barça empezaba a acariciar la Orejona pese a que aún quedaba una eternidad, toda una segunda parte que se presentaba aún más apasionante que la primera. Ferguson decidió mover el banquillo y dar entrada a Carlos Tévez, el 'Apache', en sustitución de un discreto Anderson, que apenas aportó nada por el flanco derecho. Los ingleses ganaron presencia en ataque, pero la perdieron en el centro del campo. Y con esos mimbres, la cesta del Barça fue ganando en consistencia, haciendo su dominio aún más incontestable.
El United buscaba la velocidad de sus delanteros y ceder el peso del partido al Barça, y así les fue a los ingleses. En los primeros diez minutos del segundo tiempo, los azulgrana pudieron decidir. Primero fue Henry, en una jugada en la que regateó a O'Shea y no pudo definir, completamente solo, frente a van der Sar (m.48); después Leo Messi, que no llegó por muy poco a un servicio de Eto'o (m.50); pero sobre todo Xavi, que en el 52 remató al palo izquierdo de la meta del United en un lanzamiento de falta.
Como el Barça no acababa de decidir, Ferguson dio otra vuelca de tuerca más al meter en el campo a otro delantero, el búlgaro Dimitar Berbatov, por el coreano Park Ji-Sung. Berbatov, Ronaldo, Rooney y Tévez, el no va más. Pero Leo Messi, que ganó descaradamente el duelo particular a Cristiano Ronaldo, se encargó de matar el partido en el minuto 70. La 'Pulga' remató de cabeza un centro de Xavi y puso en el marcador el 2-0, a la postre definitivo.
El Barcelona tenía ya la tercera Champions en su poder y su primer triplete. El Manchester United se vino completamente abajo. Tanto Paul Scholes, que había entrado al campo en sustitución de Giggs, como Ronaldo fueron fiel muestra de la desesperación del United, de una frustración reflejada con sus entradas salvajes a Sergio Busquets y Puyol, respectivamente. El Barça le ha demostrado con creces al hasta ahora campeón quién es el mejor de Europa y seguramente del mundo.
Ficha técnica del partido
FC Barcelona, 2: Valdés; Puyol, Touré Yayá, Piqué, Sylvinho; Busquets, Xavi, Iniesta (Pedro, m.92); Messi, Henry (Keita, m.71) y Eto'o
Manchester United, 0: Van der Sar; O'Shea, Ferdinand, Vidic, Evra; Carrick, Anderson (Tévez, m.46), Giggs (Scholes, m.74); Park (Berbatov, m.65), Rooney; y Cristiano Ronaldo
Goles: 1-0, m.9: Eto'o; 2-0, m. 70: Messi
Árbitro: Massimo Busacca (Suiza). Mostró tarjeta amarilla a Piqué (m.15), del Barcelona; y a Cristaino Ronaldo (m.78), Scholes (m.80) y Vidic (m.92), del Manchester United
Incidencias: Final de la Liga de Campeones 2008/09 disputada en el estadio Olímpico de Roma ante unos 72.000 espectadores. En el palco presidencial se encontraban el Rey Juan Carlos, el Príncipe Guillermo de Inglaterra y el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi. También estaban presentes José Luis Rodríguez Zapatero, José Montilla y los alcaldes de Barcelona y Roma, Jordi Hereu y Gianni Alemanno