José Luis Rodríguez Zapatero y los barones del PSOE son lo mismo a ojos del Partido Popular, y así lo ha querido dejar claro María Dolores de Cospedal en su discurso inaugural. Empezando por el presidente, la número dos de los populares ha criticado sus "ocurrencias extravagantes" y sus medidas para el ahorro energético, que ha definido como "110 improvisaciones a la hora".
Tras recordar que España se encuentra en un "momento histórico" al situarse en el "punto más bajo" económica y socialmente, Cospedal ha asegurado que el país se aleja de Europa en el tren de crecimiento porque está en el "vagón de cola" por culpa de un Gobierno que ha cortado las "esperanzas" de las familias, informa EFE.
Un Gobierno, ha añadido, que "sólo tiene ocurrencias extravagantes". "No es que nos prohíba circular a más de 110 kilómetros por hora, sino que tiene 110 improvisaciones a la hora", ha subrayado la dirigente popular, en alusión a las medidas de ahorro energético que el Consejo de Ministros aprobaba paralelamente.
Y precisamente porque en La Moncloa se estaba celebrando la habitual reunión del Gobierno, la secretaria general del PP ha querido referirse en su discurso a lo que ha llamado "ocurrencias extravagantes" del Ejecutivo, como las bombillas de bajo consumo o el cambio de farolas, y ha dicho que "a algunos les hace falta menos farolas y más luces".
A su juicio, el Gobierno no puede sentirse satisfecho cuando gasta 100.000 millones más de euros de lo que ingresa mientras al mismo tiempo pide a los españoles que hagan sacrificios.
Los barones socialistas, "coautores"
En cuanto a los candidatos autonómicos socialistas, Cospedal les definió "coautores" de la "nefasta" política del Gobierno de Rodríguez Zapatero y, por eso, tienen "miedo" a las urnas porque su deseo es mantenerse en el "sillón".
La también candidata del PP a la presidencia de Castilla-La Mancha ha arremetido contra los candidatos socialistas que, a su juicio, "casi no pueden salir a la calle porque apenas pueden mantener un discurso", ha asegurado.
A su juicio, estos dirigentes tienen "miedo" a las urnas. Un temor, ha añadido, que "es inversamente proporcional a la esperanza de los españoles en las urnas que traerán el cambio".
Y por ese miedo, algunos critican a sus dirigentes "con tal de aferrarse al sillón", ha señalado Cospedal en alusión, sin nombrarle, a su principal rival político, el presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, y a algunas de sus declaraciones.
Cospedal ha preguntado a los asistentes a la Convención si conocían algún dirigente o candidato socialista que "haya levantado una sola palabra contra el mayor recorte de derechos de la historia". "No lo hay", se ha respondido ella misma.
"¿Dónde estaban esos dirigentes que hoy también son candidatos? Ahora parece que sólo están entre ellos para ver quién será el líder de la oposición en España", ha continuado Cospedal en referencia al debate sobre la sucesión de Zapatero.
Los candidatos y presidentes autonómicos socialistas no han dicho nada de las tasas de paro, por ejemplo, pero defienden las "ocurrencias semanales, a veces diarias", del Gobierno de Zapatero y son "coautores de una política económica que ha desprestigiado a nuestro país", ha señalado.
Por eso, Cospedal cree que "ningún español olvidará" que los dirigentes territoriales del PSOE han sido los "principales apoyos" a la política "nefasta" del Ejecutivo.
"Son los mismos que se callaron cuando subieron los impuestos a las familias, los que se encogieron de hombros cuando tenían que cerrar su actividad miles de trabajadores autónomos o cuando cerraron empresas. Los mismos que aplaudieron una reforma laboral que sólo ha servido para abaratar el despido, los que callaron cuando quitaron la desgravación por vivienda o el cheque bebé", ha subrayado, según la agencia EFE.
Cospedal ha dejado claro que el PP no quiere "aferrarse a ningún sillón" y quiere gobernar para "cambiar las cosas" con un programa "fiable y transparente" que contribuirá a que la España de las autonomías sea la de las "oportunidades".