El Gobierno aprobó este viernes la compra de dos nuevos helicópteros para la Armada española, con un coste final superior a los 24,5 millones de euros. Los mismos provienen de los materiales excedentes de la Armada estadounidense y se encuentran a la mitad de su vida operativa.
Exactamente, se trata de dos helicópteros Sikorsky SH-60F SeaHawk que llegarán con una configuración antisubmarinos y que serán reconvertidos a una versión de transporte táctico con la instalación de asientos para la tropa.
Hasta ahora, la Armada cuenta con dos modelos de helicópteros con capacidad de transporte táctico. El primero son los Augusta Bell AB-212, que en los últimos años se han reconfigurado para ser utilizados en labores de vigilancia marítima. El segundo tipo son los Sikorsky SH-3D SeaKing, que ya cuenta con una edad excesiva y cuya retirada del servicio está prevista a corto plazo, por lo que se hace necesario su reemplazo por nuevos modelos.
Ambos modelos de helicóptero han venido participando en los últimos años en diferentes misiones internacionales. Entre las mismas, destacan la operación Atalanta, que se desarrolla en Somalia y el cuerno de África contra la piratería, y las misiones Active Endeavour y Unified Protector, que se desarrollan en el Mar Mediterráneo.
En la actualidad, la Armada española ya cuenta con una docena de unidades del Sikorsky SH60, en su versión Block I B, y que se encuentran encuadradas en la 10ª Escuadrilla de Aeronaves.