Tal día como hoy, 4 de noviembre, pero de 2010, Libertad Digital contaba en su portada que el actor Javier Bardem se presentó en el Palacio de la Moncloa para entregar 230.000 firmas recogidas por la plataforma ‘Todos con el Sahara’ para pedir que España liderara la búsqueda de "una solución pacífica y justa" al conflicto del Sahara Occidental.
Quedaban lejos los tiempos en los que Zapatero necesitaba el apoyo de los artistas para sus campañas electorales. Ya cansados de no obtener respuesta del entonces presidente del Gobierno, acudieron a la Moncloa para entregar las firmas acompañado por los actores Rosa María Sardá y Carlos Bardem y por el director de cine Fernando Colomo.
En el manifiesto se señalaba que los campamentos de refugiados saharauis vivían "un drama humanitario" y su situación "empeora año tras año". Por eso, pedían al Gobierno español que reconociera el estatus diplomático del Frente Polisario.
Entre los firmantes estaban, entre otros, Penélope Cruz, Joan Manuel Serrat, Icíar Bollaín, Rosa Regás, Willy Toledo, Verónica Forqué, Alberto San Juan, Emma Suárez, Eva Hache, Juan Diego Botto, Manu Chao, Fran Perea, Marta Nebot y Dafne Fernández.
La actitud de Zapatero en la crisis del Sahara empezó a pasarle factura. Unos cincuenta de los artistas conocidos como de la ‘ceja’ expresaron su apoyo al candidato de ICV a la presidencia de la Generalidad, Joan Herrera. Éste presentó en la sede de su partido la lista de firmantes bajo el epígrafe "Si yo viviera en Cataluña, votaría Joan Herrera". Según la portavoz de la formación política, los firmantes son "gente que siempre se ha movilizado por las causas justas".
Joan Herrera enmarcó el apoyo de esas personalidades en un ambiente de decepción entre intelectuales españoles de izquierdas: "Esto, sin la decepción respecto a Zapatero, no habría sido posible". Joan Herrera alardeó de contactos ya que "seis años y medio en Madrid te dan para trabajar mucho, he trabajado bastante y he conocido gente". Explicó que la idea surgió "en una cena con una serie de gente” y atribuyó la presencia de grandes nombres de la cultura española a la difusión de la idea por el sistema de “boca oreja”.
La siguiente factura para Zapatero por el Sahara se la pasaron Patxi López y José María Barreda. A través del intergrupo ‘Paz y libertad del Sahara’, el gobierno vasco en bloque condenó la situación generada con los altercados en El Aaiún. Además, el grupo socialista en las cortes de Castilla-La Mancha impulsaron una Proposición no de Ley "en apoyo de la causa saharaui, a fin de hacer justicia con un pueblo reprimido y maltratado". Además denunciaron las deplorables actitudes del gobierno marroquí no permitiendo el acceso a prensa extranjera.
Precisamente, la activista Aminetu Haidar acusó al Gobierno de España de colaborar con Marruecos en la "cesura" de los hechos ocurridos en el territorio del Sahara Occidental, entendiendo que el viaje acordado por ambos ejecutivos a El Aaiún para algunos periodistas es una violación del derecho a la libertad de la prensa.
La activista aseguró que el viaje para periodistas programado entre Madrid y Rabat era una "violación de los derechos humanos y de la libertad de la prensa", mientras que hizo especial hincapié en que España "está colaborando con la censura en el Sahara".
Por aquel entonces, artistas y políticos se manifestaron por el Sahara. A los habituales Javier Bardem, Pilar Bardem, Carlos Bardem, Rosa María Sardá, Lola Dueñas o Verónica Forqué, se sumaron los sindicalistas Toxo y Méndez y políticos como Cayo Lara o Rosa Díez. También participaron dirigentes del PP como Esteban González Pons, Iñaki Oyarzábal o Ignacio Uriarte.
Javier Bardem y Sardá fueron los encargados de leer el manifiesto en el que instaban al Gobierno español a "que condene esta brutal represión y ponga fin a esta violencia injustificada y cruel". Bardem exigió al Gobierno de Zapatero "una actitud clara y firme contra la ocupación del Sahara Occidental por parte de Marruecos" y “el cese inmediato de venta de material bélico a Marruecos".