
El Mundo
"Sánchez incumplió la Ley del Gobierno en funciones para amarrar el sí de Puigdemont". Nimiedades, comparado con lo que nos espera. Según Jorge Bustos, "aceptar la tramitación de una ley de amnistía significa conceder la victoria final a los delincuentes, asumir su diagnóstico de una Justicia franquista y aplicar su remedio: la desjudicialización, el privilegio, la corrupción. El oficialismo lo llama "reencuentro". Veremos eso y cosas peores, pero como estaban advertidas y los españoles han votado, solo cabe sentarse a contemplar cómo este feto acéfalo o Frankenstein II que acaba de alumbrarse en la Carrera de San Jerónimo va tomando forma, se incorpora, echa a andar sobre diecisiete patas y aprende a emitir un esperanto reaccionario que nos devuelva cantonalmente a la Primera República. Porque la Corona será lo siguiente". Exacto, los españoles han votado y la mitad ha querido esto. Nada de quejas.
"Se abre ahora la fase decisiva: la negociación de la investidura de un candidato viable. Puigdemont exigirá compromisos destituyentes que el PSOE se encargará de pasar por el esfínter de la constitucionalidad creativa, Cándido mediante. Los tertulianos orgánicos ya están por la amnistía, y estarán por el referéndum". Puchi investirá a Sánchez sin demasiadas exigencias. Y mucha parte de la ciudadanía tiene asumido el referéndum, se da por descontado.
Lucía Méndez entra en éxtasis con Sánchez. "Pedro Sánchez no sólo gana los pulsos que echa o que le echan. Es que además la vida le regala un extra. Sus grandes faenas, de las que surge fortalecido sin que se le mueva un pelo ni le salga una arruga en el traje, normalmente van acompañadas de algún infortunio o avería del adversario político". En este caso, la ruptura del PP y Vox.
"Hasta Carles Puigdemont, que ya es decir porque el ex presidente no se prodiga en generosidad con ningún representante del Estado español que le quiere detener, le ha echado una mano. El precio, de momento, no parece muy alto". Calderilla. El gran Puigdemont, el héroe, el president en el exili, se vendió por un plato de lentejas. De la independencia al traductor, decía ayer Sostres.
"La izquierda está unida y la derecha desunida. La izquierda puede armar una mayoría de Gobierno y la derecha, no. Pedro Sánchez puede ser presidente del Gobierno si Puigdemont confirma que está dispuesto a echarle la segunda mano en la investidura. Alberto Núñez Feijóo no puede ser presidente del Gobierno porque no le dan los números. Ésta es la realidad que dejaron las urnas y ningún milagro va a poder cambiar las tornas". Una verdad como un templo que está tardando en comprender el gallego.
El editorial también avisa de la que se avecina con la amnistía, las comisiones y las lenguas y tal. Supongo que así estaremos varias semanas. O toda la legislatura. Y una advertencia al PP. "Mientras el bloque izquierda-nacionalista volvió a unirse en torno al radicalismo, Alberto Núñez-Feijóo vio cómo su candidata, Cuca Gamarra, no era apoyada por Vox. Suscita dudas cuál es la relación entre el PP con su socio, cuya falta de lealtad es manifiesta. El PP tiene que reflexionar, no sólo sobre ello, sino también sobre los errores de diagnóstico que ha cometido desde el 28-M y la mala gestión de las expectativas. Con este escenario, el PP no puede dejar que el ciudadano constitucionalista al que representa se desmoralice: es su labor tomar cuanto antes conciencia de lo que significa ejercer una verdadera oposición, que es aquella que no trata solo de resistir, sino la que ofrece un proyecto, un modelo de país que movilice e ilusione a la ciudadanía". El ciudadano constitucionalista está más que desmoralizado. Y el primero, Feijóo.
El País
"La izquierda gana la presidencia del Congreso y la derecha se divide". Vende el editorial, Pepa cree que somos tontos, que "fue posible por el acuerdo a última hora entre el PSOE y Junts, formación dirigida desde Waterloo por el prófugo Carles Puigdemont". Anda ya, lo tienen todo cerrado y la investidura igual. "Las condiciones del pacto para la constitución de la Mesa no suponen en principio ninguna cesión a las reivindicaciones independentistas de fondo: una ley de amnistía y un referéndum de autodeterminación". Puchi ha vuelto a engañar a sus seguidores. La primera vez, cuando proclamó la independencia y la suspendió en 8 segundos. Y ahora porque se ha vendido a Sánchez por cuatro tontunas. ¿Así que o independencia o bloqueo? Anda que, vaya líder indepe más flojo.
"Lo que sí ha aceptado el PSOE es crear sendas comisiones de investigación sobre los atentados del 17 de agosto de 2017 en Barcelona y sobre el espionaje a líderes independentistas que, con aval judicial, llevó a cabo el CNI a través del programa Pegasus de intervención de comunicaciones". Jajajaja. Comisiones. ¿Y eso qué le importa a los indepes de Junts? No creo que haya nadie que crea en serio que el Estado haya tenido nada que ver con los atentados y los espionajes la gente se los pasa por el arco del triunfo. Los indepes también, por muy indepes que sean. No tardó Tardá en llama traidor a Puigdemont con un irónico tuit. "Los independentistas presumieron de haber conseguido llevar las lenguas cooficiales al Congreso de los Diputados, al igual que ocurre ya en el Senado". Una pasta en traductores.
Carlos Cué señala que "el estreno del escaño de diputado de Alberto Núñez Feijóo no pudo ser más deslucido. El Congreso no reflejó en absoluto la victoria electoral que él viene reclamando, sino una realidad muy clara: solo hay una mayoría posible, y es la que gira alrededor de la coalición y un gran acuerdo con nacionalistas e independentistas. O esa mayoría se consolida para la investidura de Sánchez o habrá repetición electoral. No hay más opciones". Puchi investirá a Sánchez, tranquilos.
Los columnistas, hoy hay para dar y tomar, se regodean en la soledad de Feijóo. Máriam Martínez Bascuñán habla de "la fenomenal patada que el Partido Popular dio este miércoles a Vox". Una patada sin sentido y completamente inútil. "Mientras un bloque actuaba casi como un rodillo para asegurarse la presidencia del Congreso —con todo bien atado y amarrado— el otro no paraba de deshilacharse". "¿En qué realidad vive exactamente el líder del PP?". Tiene desconcertada a izquierda y derecha.
Miquel Noguer da la enhorabuena a Junts. "El cambio de tercio en Junts no ha tardado en darles réditos para lucir a los de Puigdemont. El primer ejemplo es la carta del ministro Albares al Consejo de la UE para avanzar en la oficialidad del catalán. ¿Bastará esto a las bases de Junts? Seguro que no ¿Será suficiente para preparar la pista para la investidura de Pedro Sánchez? Probablemente tampoco. Pero lo visto este jueves es la primera vez en años que el sector pragmático de Junts puede lucir ante sus bases algún tipo de éxito que le permita intentar arrastrar al partido hacia posiciones más institucionales. Antes del verano, un alto dirigente de la formación explicaba en privado que tenían que decidirse si querían ser un partido de verdad o un simple altar dedicado a Puigdemont y a las esencias del 1 de Octubre. Lo de este jueves es una señal en dirección hacia lo primero". Pero lo ha hecho engañando, por segunda vez, a sus seguidores. A ver cómo se toman los indepes irredentos que su querido Puchi les haya traicionado.
ABC
"Sánchez sella su pacto con el prófugo Puigdemont". "Controversia en el PP por una falta de unidad en la derecha que indigna a Vox". El editorial echa humo con Sánchez, como ya se imaginarán, pero a Feijóo le arrea unas cuantas bofetadas.
"Crítica aparte merece la conducta del Partido Popular que en el último momento y al conocer el acuerdo de los socialistas con Puigdemont decidió romper sus propios pactos con Vox, no apoyarlos para conseguir un puesto en la Mesa del Congreso, y presentar así un centroderecha completamente dividido, aunque se quedara con cuatro puestos en el órgano de gobierno parlamentario. Feijóo entró ayer al Congreso con 172 escaños y salió con 139, que son los que consiguió su candidata, Cuca Gamarra. Un pésimo resultado un día que había que haber mostrado unidad constitucionalista ante unas cesiones anómalas".
¿Pero por qué?, se preguntarán. Pues porque "Génova se aferra a un giro total del PNV para justificar no ceder un puesto a Vox". Mira Feijóo, baja de las nubes. El PNV no te va a apoyar, no va a haber ningún giro, y además, necesitarías sí o sí los votos de Vox. "Abascal deja en el aire el apoyo de sus 33 escaños para una investidura de Feijóo". Esta vez, Abascal tiene razón.
José F. Peláez lo que vio fue cómo "Puigdemont decidía venderse a los españolazos". "Mucho 1-O, mucha retórica huera, mucha épica de cabezas ensangrentadas, mucha policía fascista y mucho exilio del estado represor, pero, cuando llega el momento, todos a votar 'sí' religiosamente al Partido Socialista Obrero Español como buenos vasallos. "Con esta bajada de pantalones de Puigdemont —a la primera y sin vaselina—, el PSOE aseguraba la mayoría absoluta, plurinacional y multilingüe para Francina Armengol como presidenta del Congreso". Tanto que piaba contra ERC y al final ya ves, otro botifler.
En cuanto a lo del PP con Vox, Peláez también avisa. "Si lo que buscan con esto es conseguir que el PNV vote a un gobierno del PP en solitario, lo llevan claro. El PNV no se va a mover de donde está y no va a votar a un gobierno sostenido por Vox. Y si lo que pretende Feijóo es separar por fin del todo al PP de Vox, siento decirle que es demasiado tarde". "Y si, como todo parece indicar, Sánchez consigue revalidar la presidencia de gobierno, lo de hoy solo habrá supuesto la aceleración del inevitable fracaso del proyecto de Alberto Núñez Feijóo". Con tanto bandazo nos tiene a todos mareados.
La Razón
"Sánchez ata la legislatura a las exigencias de Puigdemont". Bueno, hasta ahora tampoco es que le haya salido muy caro. Un par de comisiones que no interesan a nadie, hacer del Congreso, que sólo ven periodistas y políticos, una torre de Babel, y poco más. Además, apuesto una mano a que en el bar hablarán todos español.
Para Marhuenda, "el fugado expresidente catalán ha conseguido una clara y contundente victoria. A pesar de la humillación, los sanchistas no se cortan un pelo". "Esta legislatura vendrá con dos medidas claramente inconstitucionales: la amnistía y el referéndum. A esto hay que añadir el resto de los privilegios y los beneficios económicos que obtendremos los catalanes. ¿Alguien pone en duda la victoria de Puigdemont?". Sí, muchos creen que quien ha ganado es Sánchez. Otra vez.





