
El Laboratorio Central de Veterinaria de Algete (Madrid) ha confirmado tres nuevos positivos por el virus de la peste porcina africana (PPA) en jabalíes hallados muertos en el municipio barcelonés de Cerdanyola del Vallès. Así, ya se elevan a 16 los casos de PPA desde que el pasado 28 de noviembre aparecieron los dos primeros ejemplares de jabalí muertos a causa del virus.
Ha sido el Ministerio de Agricultura quien ha notificado estos tres casos después de casi una semana sin información sobre nuevos positivos o sobre más hallazgos de cadáveres. El foco se centra en el IRTA-CReSA (Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentarias-Centro de Investigación en Sanidad Animal), un laboratorio de la Generalidad emplazado en el campus de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) en Bellaterra. Todos los jabalíes con peste han aparecido en los alrededores de ese centro de investigación en el que según ha informado El País este viernes, se estaban llevando a cabo ensayos con la cepa del virus de la peste porcina africana detectada hasta ahora en 16 cadáveres de jabalíes.
115 cadáveres
De momento no se han hallado cuerpos de jabalíes infectados fuera del perímetro de 20 kilómetros establecido para tratar de contener el brote de peste. La Generalidad asegura además que no ha habido positivos en los cerdos de las 55 granjas cercanas al punto donde se están encontrando los animales con el virus. En total se han analizado 115 cadáveres de ejemplares encontrados en carreteras y en vías ferroviarias y que supuestamente habrían muerto por atropello, según la consejera de Interior de la Generalidad, Núria Parlon. Los análisis han resultado negativos.
En el plano económico, la Generalidad ha dado luz verde al primer expediente de regulación temporal de empleo (ERTE), que afecta a unos cuatrocientos trabajadores. Las pérdidas se estiman en unos 30 millones de euros semanales.
Mientras tanto, prosigue la investigación del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil y la del comité de expertos designado por la Generalidad. El consejero de Agricultura, Óscar Ordeig, insiste en que no se puede descartar ninguna hipótesis, pero todas las sospechas se centran en el laboratorio de la Generalidad sito en Bellaterra, localidad colindante con Cerdanyola. Se trata de una zona boscosa dentro del parque de la sierra de Collserola en el que durante las últimas décadas han proliferado los jabalíes sin control.
Ahora, la Generalidad quiere acabar con la mitad de la población. Es decir, exterminar unos sesenta mil ejemplares. Sin embargo, todavía no se ha dado luz verde a ese plan. Lo que sí se ha montado ya es una "mesa del jabalí" con políticos, expertos y cazadores.


