Consensos y disensos.

Es casi imposible en una sociedad compleja y de diversos intereses, gobernar siempre por consenso, el intentarlo es noble labor, pero el tiempo es una importantísima cuarta dimensión, y difícil de cuadrar con el devenir de los acontecimientos.

Cuando se está en lo de galgos o podencos, o en dirimir el sexo "Angelorum", a nada que nos descuidemos se nos pasa el arroz, y lo que debería ser el fin de una negociación, se torna en comienzo, y es que intentar el consenso a macha martillo, no es tenacidad, es mas bien empecinamiento.

El problema, es que nadie parece querer asumir responsabilidades, se marea la perdiz ad nauseam, con tal de poder decir...yo lo intenté, pero cuando se quiere gobernar con mano firme, es mejor después de la reflexión y la valoración de los actos, actuar en el disenso.

Como con intereses contrapuestos se puede actuar siempre en consenso...? imposible, y la mayoría de las veces una pérdida de energía y de tiempo, itrrecuperables, sobre todo cuando se actúa con mayoría absoluta, actuar por disenso es gobernar, el resto cobardear en tablas.