Definitvamente, esto es peor que una república bananera ++

Se me han puesto los pelos como escarpias cuando acabo de oir a un senador del Psoe justificar, en aras de acabar con la corrupción, justificar la vulneración del Estado de Derecho por parte de los jueces, en clara alusión a la condena de Garzón.

Y lo peor es que es evidente que el alegato no lo ha hecho en favor de acabar con la corrupción, que aunque de todos modos seria una barbaridad sin calificativos el que un senador justifique que se infrinjan y vulneren las leyes que el mismo hace, aunque la corrupción le llegara al cuello, sino que lo espantoso es que lo haga por mero interés partidista.

Y es evidente, porque a este senador, el cual está dando por incuestionable la culpabilidad de Rajoy el PP porque han salido indicios en los periodicos, se le ha olvidado con una facilidad pasmosa que el juez que vulneró el derecho de defensa en los procesos judiciales -con supuesto ánimo de combatir la corrupción- era a su vez otro presunto corrupto, demostrado con indicios del mismo tener que nunca fueron negados, que le sacaba dinero a los bancos a cambio de archivar las causas contra los dirigentes del banco.

Esto son las consecuencias delirantes de la partidocracia, porque ese seudolegislador es muy consciente que él no representa a ningún ciudadano ni a ningún elector, que él es solo un funcionario al servicio de su partido, que hará lo que le mande su partido y que mas allá de su partido no hay nada que defender y respetar.

Estos legisdores partidocratas son idénticos a los diputados en las Cortes de Franco, que tenían claro que ellos no representaban al pueblo, que no estaban allí para defender a los ciudadanos, sino para obedecer ciegamente a quien lo nombró, o sea, a Franco.

La única diferencia con una dictadura es que en lugar de un solo partido de estado en la parftidocracia hay variios partidos estatales (fundamentalmente dos) y que los ciudadanos podemos dar a cada uno de ellos la parte alicuota de poder que tendré en el conjunto y que despues entre ellos hagan lo que hacía el de Franco, o sea, servir y defender al Estado.

Saludos