El liberalismo ha sido, a través(+)

de la Historia, una vía para desarrollar las posibilidades económicas y el progreso de los
pueblos, ha posibilitado una sociedad del bienestar que ha permitido el progreso de
personas modestas, ha hecho posible un acercamiento civilizado entre posiciones
opuestas, y un largo etcétera. Pero, tristemente, ha propiciado unos abusos que, los que
han tenido la responsabilidad de combatirlos, no han querido o no han podido remediar.
Ahora mismo es noticia la envolvente de crisis y escándalos que afectan a dirigentes de
la Ceoe, ahora que precisamente se necesitan personas íntegras que hagan posible una
recuperación sólida de los distintos y variados sectores productivos, que hagan posible
seguir ganando confianza a todo el entorno, para que se consolide con seriedad el
aumento de puestos de trabajo y resulta que algunos de los que pueden hacerlo posible
tienen la maldad de poner los intereses de todos en juego. Entiendo que es una
maldición inmerecida que demanda que se combata con la dureza que el caso requiere.
Sin contemplaciones, y sin amaños ni arreglos de ninguna clase.