España está en la mitad inferior de la OCDE en lo que respecta a la productividad. No es un resultado horrible, pero queda muy lejos de los mejores. Eso sí, si añadimos otro dato a este primero, la foto es mucho menos agradable: en cuanto al empleo de la mano de obra y el número de horas trabajadas, estamos en la cola del club de los países más ricos. Y no es porque nuestras jornadas laborales sean cortas: el empleo temporal y a tiempo parcial tienen mucho que decir en esta clasificación. | OCDE