Evento Cutty Sark Prohibition Edition
La firma Cutty Shark obsequió a unos pocos privilegiados con una peligrosa ruta secreta por los lugares claves de la ruta del alcohol. ¿Preparados? Estamos en plena ley seca, una época de peligrosos tiroteos, sombreros de ala ancha y sexualidad clandestina... La ley nos sigue los pasos ¿nos acompaña?
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Hace aproximadamente 90 años se instauró la ley seca en EEUU, acto seguido, surgió la marca de whisky Cutty Sark. Ahora se cumplen 80 años de la Enmienda XXI, la cual derogaba el Prohibition Act. El capitán Bill McCoy era el encargado de la distribución de Cutty Sark en los Speakeasies, bares ocultos en plena prohibición.
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Con motivo del lanzamiento de Prohibition Edition, Cutty Sark ha "raptado" a un grupo de invitados en Madrid para que vivan en primera persona la clandestinidad que envolvía, casi un siglo atrás, el consumo de este destilado.
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El mismísimo Rob McCoy guió a un grupo de afortunados por la peligrosa ruta del alcohol. McCoy alcanzó una impecable reputación como distribuidor ilegal. La calidad de su mercancía era máxima, nunca estaba adulterada.
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Los callejones más ocultos de la capital madrileña albergaron los mejores licores. Era el destino principal de una ruta llena de misterio y sorpresas, algunas propias de los bares de la Ley Seca.
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En la particular odisea en busca del fruto prohibido, los elegidos tuvieron que taparse los ojos con vendas. Cuanto menos sepan del lugar, menos podrán contar a las autoridades en caso de una inesperada redada.
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Las mejores azafatas guiaron a los desconocidos en la oscuridad del local clandestino. Dentro les esperaban todo tipo de sensuales sorpresas, no sólo alcohol... un nada improvisado strip-tease acabó de amenizar la velada ilegal.
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Tras la pared de una tranquila y aparentemente normal frutería ambulante, se escondía el paraíso del juego, el alcohol y la buena comida.
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No faltó ni una timba de póker con regalos insospechados y en la que se desgustaron los 50º de este whisky. Y como no podía ser de otra forma recibimos la inesperada visita de la policía en plena partida.
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