La encuesta que hizo pública el pasado domingo El País sigue haciendo daño al PSOE. Primero fueron las primarias en Madrid, donde los militantes dieron la espalda a la candidata oficialista impulsada desde Moncloa. Ahora, la marca ZP sigue dando alergia a los barones que ven cerca los comicios autonómicos y temen llevarse el castigo que el electorado quiere dirigir a Zapatero.
La pólvora prendió con más fuerza este viernes cuando el barón manchego José María Barreda renegó del presidente del Gobierno de forma explícita y eminentemente gráfica.
La primera en reconvenir a Barreda fue el mismo viernes la vicepresidenta De la Vega, que este sábado también ha estado en Onda Cero, donde ha negado que en el PSOE haya alguien que comparta la opinión de Barreda.
Barreda rectifica
Así, el presidente de la Junta de Castilla la Mancha ha dado marcha atrás y, recordando sus propias palabras de este viernes, ha dicho que sus asesores le han reconvenido y le han dicho que diga que "no estuve acertado". Por encima de todo, ha querido que quede claro que Zapatero cuenta con "mi apoyo y con mi afecto".
Es curioso que este mismo sábado, casi al tiempo que Barreda hacía estas declaraciones, el secretario general del PSOE en Ciudad Real, señalaba que el sentir manifestado el viernes por Barreda, cuando pedía un giro de cara a las elecciones para superar esos 15 puntos de diferencia que les aventaja el PP, es el sentir de la mayor parte de la militancia.
"Era el sentir de la militancia socialista"
En todo caso, ha remarcado que el secretario general del PSOE y presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "cuenta con mi apoyo y con mi afecto". Cuenta con su apoyo y con su afecto, ha reiterado, y ha remarcado que "yo estoy en este barco y, además, dispuesto a remar como el primero".De la Vega: "No hay un movimiento sísmico en el PSOE"
Por su parte De la Vega ha estado este sábado en Onda Cero y ha dicho que la mayoría de los dirigentes socialistas no comparte las críticas del presidente de Castilla-La Mancha a la política de José Luis Rodríguez Zapatero, y ha subrayado en el PSOE "no hay un movimiento sísmico".
"No hay un movimiento sísmico en el PSOE", ha dicho, ni a raíz de las palabras de Barreda ni tampoco por la derrota de Trinidad Jiménez en las primarias socialistas en Madrid, pese a ser la candidata que apoyaban Zapatero y la dirección federal del partido.
Respecto a Barreda, la vicepresidenta ha asegurado que lo que dijo es una opinión personal respetable, pero ha garantizado que "el resto de líderes socialistas", y ella misma, discrepan de sus palabras.
Unas declaraciones, ha insistido, que "no se corresponden con el sentir mayoritario del PSOE" ni tampoco de los miembros del Gobierno, y ha añadido que si hay alguna otra voz discordante más entre los socialistas "hasta ahora no se ha expresado".
También ha querido zanjar el debate sobre si Zapatero debe volver a ser candidato del PSOE a las elecciones generales, asegurando que todos los socialistas comparten la idea de que quien está ejerciendo el liderazgo es quien tiene más capacidad para recuperar la confianza de la ciudadanía.
Blanco cree que es "exagerado"
Otro que ha querido apagar fuegos este sábado ha sido José Blanco. En declaraciones a Efe, ha señalado que las reformas del Gobierno son "el golpe de timòn" que demanda Barreda. En el Gobierno todos matizan este sábado las declaraciones del presidente de Castilla la Mancha. Blanco cree exagerado hablar de una rebelión de barones.
Además, ante la posibilidad de que se esté produciendo una rebelión de barones socialistas (ninguno quiere ver a Zapatero en su comunidad de cara a los próximos comicios autonómicos), Blanco señala que es exagerada.
Justo antes de participar en la inauguración de dos tramos de la autovía A-8 en Lugo, ha considerado "exagerado" que se hable de rebelión por parte de algunos barones del PSOE.
Por tanto, ha señalado, "hay que continuar con el rumbo marcado, una desviación de los objetivos que hemos establecido sería muy pernicioso para el futuro económico y del bienestar de nuestro país". De todas formas, dice que el rumbo del Gobierno "es claro", aún cuando ha reconocido que el camino "es duro".
Trinidad Jiménez: Zapatero es "el único candidato posible"
No ha querido faltar la ministra de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez, que ha tachado hoy de "improcedentes" las declaraciones del presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, y ha asegurado que "para todos los miembros del PSOE, el único candidato posible" es José Luis Rodríguez Zapatero.
En declaraciones a los periodistas antes de clausurar en Málaga el congreso de WONCA, la organización europea de médicos de familia, Jiménez ha manifestado que "no solamente dentro del Gobierno, sino del PSOE", todos quieren que Rodríguez Zapatero continúe como presidente del Ejecutivo y sea el candidato socialista.
Jiménez ha aseverado que "no hay ninguna otra persona ni hay tampoco ningún debate dentro del PSOE para que eso cambie", y ha reprobado por "improcedentes" y "desafortunadas" las afirmaciones de Barreda en las que éste avisó de la necesidad de que el Gobierno cambie de rumbo para evitar una catástrofe electoral en el PSOE.
"En los momentos difíciles y momentos complejos -ha referido- es cuando más se tiene que demostrar la cohesión interna como todos los miembros del Gobierno estamos demostrando y, por cierto, como el resto de dirigentes del PSOE están demostrando".
La ministra ha señalado que el Gobierno trabaja "con mucha determinación, seriedad y firmeza" para solucionar los problemas que tiene el país, y que está "poniendo fin a una etapa que ha sido muy difícil".
Preguntada por si le han molestado las palabras de Barreda, Jiménez ha comentado que en el PSOE existe "un clima" en torno al cual están todos "aglutinados", que es en torno a Rodríguez Zapatero, por lo que ha considerado "absolutamente improcedente lanzar ese tipo de mensajes".
Por otro lado, la ministra de Sanidad ha dado por "zanjado" el asunto relativo a las declaraciones que hizo el presidente de la Comisión Constitucional del Congreso, Alfonso Guerra, en las que se refirió a ella como "señorita Trini", mientras que para el candidato a la Comunidad de Madrid, Tomás Gómez, utilizó "señor Gómez".
Tras reiterar que el respeto es "fundamental" no sólo en las relaciones políticas, sino también en las personales, Jiménez ha indicado que Guerra ha hecho unas declaraciones en el sentido de que nunca quiso ofenderla, por lo que las acepta y da por "ya zanjado" el asunto.