PNV (Partido Nacionalista Vasco)

El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, adelantó este jueves que el lehendakari Ibarretxe exigirá en su entrevista con Zapatero que se cumpla el contenido de las conversaciones de Loyola, en las que tomaron parte el PNV, el PSE y Batasuna, y que se celebraron en 2006 durante la tregua de ETA. En ello, se incluye que no exista una "subordinación" política de la comunidad vasca a España. En declaraciones a la SER, el ministro Rubalcaba ha asegurado que espera del encuentro "acuerdos" fruto de la "voluntad de diálogo".

Dos caras y una cruz. Las "mociones éticas" consensuadas por PSE y PNV en las que se invita a los ediles de la franquicia electoral de ETA, ANV, a que dimitan si no condenan el terrorismo corrieron suerte dispar en los ayuntamientos guipuzcoanos de Legazpia, Placencia de las Armas y Villabona. En las dos primeros fue aprobada, en el segundo fue rechaza debido a la ausencia de dos ediles del PNV y una de IU.

Juan José Ibarretxe, harto de esperar la anunciada reunión con José Luis Rodríguez Zapatero, ha remitido una carta al presidente del Gobierno en la que le emplaza a mantener un encuentro para hablar del "futuro" político del País Vasco. Además, ha anunciado que le enviará "una propuesta abierta de pacto". Pese a ello, Josu Erkoreka rebajaba la expectativas de la cita, todavía sin fecha. Según dijo, "no dará para mucho".

El PNV rebaja las expectativas de la reunión todavía sin fecha entre Ibarretxe y Rodríguez Zapatero. En opinión de Josu Erkoreka, el encuentro se producirá aunque auguró que "no dará para mucho". "Zapatero se limitará a cumplir el papel sin más", ha aseverado en una entrevista concedida a Euskadi Irratia. El motivo, según el dirigente nacionalista, es que el PSOE piensa que repetirá "el globo electoral" alcanzado el 9-M en el País Vasco en las elecciones autonómicas.

Carmelo Barrio ha asegurado que la advertencia de Andoni Ortuzar a Zapatero es "puramente estética" porque dicha formación y el PSE "están en una unidad de acción". El distanciamiento entre el Presidente e Ibarretxe que se desprende de esas declaraciones es una mera escenificación "de cara a la galería", afirmando que la única alternativa al PNV está fuera del PSE. También ha contestado a Iñigo Urkullu, que abogó por el plan secesionista vinculándolo a la lucha contra ETA, considerando que se deben a la "profunda crisis" abierta en el PNV.

En una muestra más de la radicalización de sus posturas, el PNV ha vuelto a defender la consulta secesionista e ilegal que proyecta Ibarretxe para el próximo mes de octubre. Este domingo, la respalda Urkullu y también el presidente del partido en Vizcaya, Andoni Ortúzar, que ha lanzado un desafiante mensaje al Gobierno: "Si lo que quiere es la confrontación, el PNV va a coger ese guante y va a tener enfrente no sólo al PNV, sino a la mayoría social de este país". El PP ve en estos cruces de acusaciones una escenificación de cara a la galería.

Urkullu ya no se desmarca como hacía antes del referéndum ilegal convocado por Juan José Ibarretxe. Si tras el descalabro electoral del 9-M aseguraba que era "cosa" del lehendakari, ahora lo asume como propio y amenaza con su celebración en el mes de octubre, pese a la persistencia del terrorismo. En una entrevista al Diario Vasco, el líder del PNV aboga por "explicar mejor" a los vascos la consulta secesionista y la vincula a la lucha contra ETA.

El PP llevará al Parlamento vasco la ambigüedad del Ejecutivo de Ibarretxe en la lucha contra ETA. "¿ Nos acerca a la paz, en opinión del Gobierno, abrir espacios de impunidad a quienes, desde las instituciones y fuera de ellas, complementan políticamente la acción del terrorismo?", le preguntará el popular Carlos Urquijo a la portavoz del Gobierno Vasco. Para el PP es incomprensible que hayan criticado el encarcelamiento de la alcaldesa proetarra en Mondragón.