Pocos pasos, rápido, fácil y con pocos ingredientes... ¿Qué mejor que hacer uno mismo sus propios cereales? Si estás preocupado por la cantidad de azúcar que llevan los cereales industriales es la mejor opción, además así puedes ponerles los ingredientes que desees, chocolate, fruta, miel... lo que quieras.
La granola es una combinación de cereales y frutos secos. Los ingredientes pueden variar al gusto: avena, nueces, almendras, fruta deshidratada, cebada, etc. Se suele comer en el desayuno, acompañando la leche o el yogur.
En los supermercados se vende granola ya hecha, y también muesli, que es prácticamente lo mismo, al menos a nivel comercial. La diferencia básica (en la teoría) es que la granola se tuesta y lleva azúcar, y el muesli es simplemente la mezcla de los ingredientes en crudo.
La ventaja de prepararla en casa es, como decíamos, poder controlar al 100% los ingredientes que utilizamos: evitar las grasas saturadas y el exceso de azúcar, sobre todas las cosas.
Esta granola casera es una base que se puede modificar de mil maneras. De hecho nosotros la hemos enriquecido ligeramente con avellanas y uvas pasas, pero podríamos haberle agregado pipas de girasol o de calabaza, almendras u otros frutos secos, frutas deshidratadas, semillas, aceite de sésamo o coco, etc. Al gusto.
Desde Libertad Digital os damos una idea con chocolate, crema de cacahuete y avellanas, pero los ingredientes podéis adaptarlos a vuestros gustos e intolerancias. Coge papel y bolígrafo, pruébalo y nunca más comprarás cereales en el supermercado.
Ingredientes:
- 100gr de copos de avena
- 50ml de bebida de chocoavena
- dos cucharadas de pasta de dátiles
- dos cucharadas de crema de cacahuete
- 12 avellanas tostadas
- una cucharada de cacao puro en polvo
Preparación:
Lo primero que debemos hacer es, en un bol, echar dos cucharadas de crema de cacahuete, dos de pasta de dátiles, una de cacao puro en polvo y la bebida de chocoavena. Removemos bien para integrar todo a la perfección. Si vemos que nos queda muy espeso añadimos un poco más de bebida.
Ponemos a precalentar el horno a 180ºC. Mientras se calienta echamos a la mezcla los copos de avena y un puñadito de avellanas tostadas picadas.
Hacemos movimientos envolventes con un tenedor hasta que toda la avena esté bien impregnada con el chocolate. Ahora preparamos una bandeja con papel de horno y echamos la mezcla sobre ella. La prensamos bien para que no queden pegotes pero hacemos agujeros para que el calor pase por todo.
Una vez tenemos eso bajamos la temperatura a 150º y metemos la bandeja con la granola durante 30 minutos. Pasado el tiempo apagamos el horno con la bandeja dentro para que, con el calor residual, termine de hacerse y quede crujiente.
Sacamos y lo vamos desmenuzando, una vez listo lo metemos en un bote hermético y a disfrutar cuando nos apetezcan cereales.