José Mourinho, técnico del equipo madridista, ya había advertido el pasado lunes, en la víspera del partido de ida de dieciseisavos de final de la Copa frente al Murcia en la Nueva Condomina (0-0), que "la culpa de que Benzema no juegue es de Higuaín, que está trabajando como nunca".
El portugués pretendía eliminar así parte de la tensión que había descargado dos días antes sobre Benzema, que el próximo 19 de diciembre cumplirá 23 años. El pasado sábado, minutos después de la goleada del Madrid en el Santiago Bernabéu contra el Racing de Santander (6-1), reconoció que le pondría "una cruz" a quien no diera la talla en Murcia.
Y así ha ocurrido con Benzema. Una vez más. El ex jugador del Olympique de Lyon, apuesta personal de Florentino Pérez cuando lo fichó en verano de 2009 y por quien el Real Madrid ha pagado 36 millones de euros, estuvo indolente, lento en la ejecución y no tuvo fortuna alguna en los 62 minutos que jugó en la Nueva Condomina, antes de ser sustituido por Gonzalo Higuaín. Lo más lógico es que Benzema goce a partir de ahora de muy pocas ocasiones, especialmente teniendo en cuenta el buen momento de forma por el que atraviesa el Pipita.
Pero El Confidencial va más allá y asegura que el jugador será traspasado el próximo mes de enero en el mercado de iniverno porque "su crédito se ha terminado". Al parecer, Mourinho ya intentó que el francés fuera traspasado el pasado verano, pero los directivos del club blanco, con Jorge Valdano a la cabeza, le pidieron al técnico que le diera una oportunidad. El de Setúbal aceptó, pero el diario insiste en que a Benzema ya le han colgado el cartel de "transferible" y que sólo permanecería en el Real Madrid si no logra traspasarlo a otro club antes del 31 de enero. De momento, la Juventus de Turín y el Manchester United parecen los mejor situados para intentar hacerse con sus servicios.
Exabruptos, proxenetismo, accidentes...
Además de las malas actuaciones que lleva Benzema desde que fichó por el Madrid, tampoco es que ayuden precisamente las declaraciones que realizó en el programa Punto Pelota de Intereconomía TV el pasado jueves cuando, ni corto ni perezoso, afirmó que su trabajo en el equipo blanco es "meter goles, no correr hacia todos lados".
Ésta ha sido la última polémica protagonizada por el francés, que sólo ha marcado un gol esta temporada en cuatro partidos: fue el pasado 21 de septiembre, cuando el Real Madrid goleó (3-0) al Espanyol en el partido que abrió la cuarta jornada de Liga –Benzema hizo el tercero, mientras que los otros dos restantes los marcaron Cristiano Ronaldo, de penalti, e Higuaín–.
Cabe recordar que el pasado 21 de abril fue acusado de mantener relaciones sexuales con Zahia Dehar, una prostituta francesa de origen magrebí, cuando ésta tenía 16 años en 2008. Meses después aparecía como imputado en una red de proxenetismo junto a su compatriota Franck Ribéry, del Bayern de Múnich.
Ello, unido al bajo rendimiento que demostró la pasada temporada en el Madrid –sólo marcó nueve goles en 33 partidos–, llevó al entonces seleccionador galo, Raymond Domenech, a dejarle fuera de la convocatoria para el Mundial de Sudáfrica, en el que el conjunto bleu quedó eliminado a las primeras de cambio.
Benzema tampoco parece contar con la confianza del sucesor de Domenech al frente del equipo nacional, Laurent Blanc, al haber llegado tarde, junto a su compañero madridista Lass Diarra, a la concentración de Francia en Clairefontaine para preparar los partidos de clasificación para la Eurocopa frente a Rumanía y Luxemburgo. Benzema, para redimir sus pecados, marcaría después un gol en el segundo de esos encuentros.
Además, el ariete francés se ha visto involucrado en dos accidentes de tráfico, ambos sin daños para el futbolista, desde su llegada a España. El primero tuvo lugar en la madrugada del 30 de noviembre de 2009 cuando el jugador llegaba a su casa desde el aeropuerto de Barajas tras disputar el clásico contra el Barcelona (1-0). El segundo ocurrió casi un mes después, en la madrugada del 24 de diciembre, mientras se encontraba de vacaciones de Navidad en la Isla Reunión. Benzema celebraba su vigésimo segundo cumpleaños cuando, al regresar, sufrió un accidente de tráfico contra un bordillo de hormigón junto a su compañero, el rapero francés Rhoff. Ninguno sufrió daños, pero las versiones del accidente fueron muy contradictorias.
El jugador manifestó el pasado 16 de agosto, a dos semanas para el comienzo de la temporada oficial, que ahora se sentía mucho más adaptado al club y a España después de "un año difícil", en el que apenas se integraba con sus compañeros. Con "fuerzas renovadas", el jugador prometió trabajo y goles para hacerse con un hueco en el once. De momento, cumplidos ya dos meses de competición, el jugador no goza ni de crédito, ni ve portería rival ni mucho menos tiene un sitio en la titularidad con Mourinho. Los 62 minutos que jugó este martes en Murcia podrían haber sido los últimos con la camiseta del Real Madrid.