"Grecia se tiene que dar cuenta de que debe corregir una trayectoria que era aberrante", declaró Jean-Claude Trichet en una entrevista a la emisora de radio francesa RTL y a la cadena de televisión LCI.
Recordó que en el Consejo Europeo de esta semana se decidió "la verificación de cifras", es decir, que las cuentas griegas serán auditadas por terceros y que, por su parte, "Grecia se ha comprometido a tomar las medidas necesarias" para restablecer la situación de sus finanzas públicas. "Cada país está bajo la vigilancia de los pares", una vigilancia que fue "poco rigurosa en algunos casos, como hemos dicho para Grecia", reconoció el presidente del BCE.
Por otro lado, interrogado sobre la sinceridad de los datos ofrecidos por Italia, Trichet respondió que no duda "a priori de la credibilidad y de la transparencia de las cuentas públicas italianas" y cuando se le preguntó sobre la situación económica española y sus finanzas públicas, respondió que no tiene "ninguna razón para tener dudas sobre ningún país", más allá de reconocer que en la zona euro "tenemos un problema particular con Grecia".
Además, añadió que hay "un problema de finanzas públicas muy importante" no sólo en la zona euro, sino en los países desarrollados en conjunto, declaró. Según Trichet, "si queremos facilitar la recuperación" económica, los particulares, las empresas y los mercados "deben tener confianza en que la situación de las finanzas públicas vuelva a una situación sostenible".
Asimismo dijo que le parece suficiente el compromiso de todos los países de la zona euro, que en una declaración de los jefes de Estado y de Gobierno el pasado jueves se comprometieron a tomar "las medidas necesarias si fuera necesario" para ayudar a Grecia: "Eso me basta. Que cada uno cumpla sus compromisos", señaló.
Eso sí, no quiso entrar a valorar si esto será suficiente para atajar los movimientos especulativos y devolver la calma a los mercados, con el argumento de que "nunca" comenta "las evoluciones de los mercados", porque su misión es garantizar la estabilidad de precios.
Sobre una supuesta reticencia de la canciller alemana a anunciar ayudas concretas para un eventual salvamento de Grecia, Trichet puso el acento en que Angela Merkel, como todos los demás líderes, "dijo que tomaría, si fueran necesarias, las medidas para estabilizar la zona euro".
El presidente del BCE reconoció que lo ocurrido con Grecia "no es tolerable, no debería haber sido tolerado y no se tolerará", por lo que "debe corregir lo que hizo en el pasado" cuando tomó decisiones "totalmente al margen" de la regla de estabilidad de precios y del Pacto de Estabilidad.
Precisamente, indicó que es este Pacto de Estabilidad y Crecimiento suscrito por los países de la moneda única el que constituye la base del tan comentado "gobierno económico europeo". "Un gobierno económico es una entidad que toma decisiones y las aplica (...) que puede imponer decisiones" a los países miembros y "eso es lo que prevé el Pacto de Estabilidad", declaró.