Tal día como hoy, 11 de septiembre, pero de 2008, Libertad Digital contaba en su portada los insultos recibidos por el Partido Popular en la ofrenda floral con motivo de la Diada de Cataluña: "Dirigente del PP, recibidos al grito de "puta España", entonan Els Segadors".
Un año más el PP fue recibido con una sonora pitada y toda clase de insultos a su llegada a la ofrenda floral frente al monumento de Rafael Casanova. Los radicales independentistas les llamaron "traidores" y les conminaron a "iros a la puta España".
Un año más tarde, el objetivo de los insultos fue la presidenta del PP catalán Alicia Sánchez Camacho. Más tarde, en la manifestación de la Diada, cuatro independentistas quemaron una bandera española y otra francesa.
La tensión y la explosión independentista han ido aumentando con el paso de los años. En 2010, quemaron una Constitución de metro y medio antes de que dos encapuchados quemaran una foto del Rey al término de la manifestación unitaria a favor de la independencia que se celebró en Barcelona con motivo de la Diada, fecha que los nacionalistas consideran fiesta nacional de Cataluña. Pocos minutos después, otros cuatro encapuchados subieron al mismo escenario y quemaron una bandera española. Más tarde, se puso punto y final a la marcha con las siguientes palabras: "Después de este bonito acto -refiriéndose a la quema de los símbolos españoles- damos por finalizada la marcha".
Un año más tarde, el protagonista fue el alcalde de Badalona Xavier García Albiol que había decidido suspender en Badalona los actos institucionales. Fuertemente escoltado tuvo que soportar gritos de "fuera, facha, botifler, nazi" y pidiendo su dimisión y la independencia. Ya en la tradicional manifestación independentista se volvieron a quemar la foto del Rey y la bandera de España.
Pero fue en el año 2012 cuando el desafío separatista se hizo más patente. Una veintena de independentistas amenazaron a la presidenta del PPC antes del acto institucional en el Parque de la Ciutadella de Barcelona. Lanzaron consignas como en contra de Alicia Sánchez Camacho como "fascistas", "moríos todos", "bocazas", “corruptos”, “demagoga de mierda”, “ladrona” o “sin vergüenza”, además de meterse con su aspecto físico.
Ya por la tarde, cientos de miles de catalanes participaron en una manifestación a favor de la independencia de Cataluña encabezada por el Gobierno de la Generalidad. Durante la marcha se escucharon consignas de "independencia", "Mas lidera o dimite" y "español el que no vote". Un año más, los radicales independentistas quemaron banderas de España, Francia y la Unión Europea.