Pere Aragonès y Pedro Sánchez se han visto cara a cara este viernes a las puertas del Hotel W de Barcelona, donde se celebran las tradicionales jornadas del Círculo de Economía. Un día después de que la directora del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Paz Esteban, compareciera en la comisión de secretos oficiales para dar cuenta del caso Pegasus, dos de las "víctimas" de espionaje con ese programa para infectar teléfonos móviles se daban de bruces.
Sánchez y Aragonès han charlado un par de minutos. Según difunde la Generalidad, Aragonès trasladó a Sánchez la "gravedad" del asunto y le pidió una reunión para abordar el expediente. El presidente de la Generalidad quiere que se aclaren los motivos por los que su móvil particular fue infectado con el programa cuando era vicepresidente y el independentismo llamó a tomar el aeropuerto de El Prat e incendiar las calles en respuesta a la sentencia del Tribunal Supremo por el golpe de Estado de 2017.
Tal operación contó con autorización judicial, pero ERC trata de explotar la debilidad mostrada por el Gobierno ante las acusaciones separatistas y quiere que se desclasifiquen los motivos de tal autorización judicial. En la Generalidad recuerdan que está en juego la legislatura.
Sánchez lo niega todo
Sánchez niega que tuviera constancia de la investigación del CNI o conocimiento de sus resultados y en absoluto la ordenó, afirma. Haberse presentado como otra víctima de espionaje no ha conmovido a sus socios de ERC.
Los saludos no han sido especialmente efusivos. Aragonès aguardaba a las puertas del hotel al que Sánchez ha llegado acompañado por un séquito formado por la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez; el titular de Cultura y Deporte, Miquel Iceta; la delegada del Gobierno en Cataluña, Maria Eugènia Gay; el teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona Albert Batlle; y el presidente del Cercle d'Economia, Javier Faus.
Tras un primer saludo, Sánchez ha buscado a Aragonès para mantener la breve conversación en la que el dirigente separatista ha advertido al presidente del Gobierno sobre las consecuencias de no ceder a sus pretensiones en el caso Pegasus, como el cese de Paz Esteban. Esperaban a Úrsula Von der Leyen, la presidenta de la Comisión Europea, galardonada por el Círculo de Economía catalán con el premio a la Construcción Europea.
Ya dentro del hotel, Sánchez ha mantenido una reunión con la Von der Leyen en la que afirma haber hablado con ella de la guerra de Ucrania y de la propuesta que España y Portugal han enviado a Bruselas para poner un tope al precio de la electricidad. "Esperamos el visto bueno de la Comisión para su puesta en marcha", ha dicho Sánchez.
Guiños a Aragonès
En el acto de entrega del premio a Von der Leyen, Pedro Sánchez ha aprovechado su discurso para lanzar varios guiños a Pere Aragonès. Así, ha expresado su "profundo respeto a Cataluña y sus instituciones" y ha hecho un elogio del "diálogo" con esta frase: "No hay meta más noble para un político que construir convivencia para que nuestros ciudadanos vivan en sociedades sin fracturas".