Las tres encuestas publicadas los últimos días no reflejan grandes cambios, pero además de coincidir casi al milímetro en la mayor parte de los datos –o entre otras razones por ello– son una fotografía muy interesante de una situación que debería preocupar un tanto al PP, pero sobre todo debería alarmar al PSOE, por mucho que ligeras mejoras o las enormes trolas del CIS puedan servir a los de Sánchez para autoengañarse.
Lo cierto es que resulta llamativa la coincidencia de las cifras en los tres sondeos: en el de Sigma Dos publicado por El Mundo el PP tendría un 33,6% del voto; para el de Sociométrica para El Español estaría en el 33,7%; y el de Hamalgama Métrica para Vozpopuli apuesta también por el 33,6%.
El PSOE estaría en el 27,4%, 27,2% y el 26,5%, respectivamente, en los tres casos claramente por debajo de su resultado antes del estallido del caso Cerdán. Por su parte, un Vox al alza se sitúa en el 16,2%, 16,9% y, el dato más discordante, en el 18,5% según Hamalgama Métrica.
Sumar y Podemos, finalmente, siguen repartiéndose migajas, con una suma que solo supera con claridad el 10% en el caso de Sigma Dos y que para todos es favorable a los de Yolanda Díaz.
Los datos sobre el reparto de escaños son también muy interesantes, sobre todo el hecho de que incluso la previsión más prudente –la de SigmaDos– le da a la suma de PP y Vox nada más y nada menos que 199 diputados, una cifra casi idéntica a los 200 que da Sociométrica y no muy lejana de los 207 que da Hamalgama Métrica, la más optimista para el centro derecha.
Las conclusiones son varias: la primera que el PP está más o menos estable, pero en una tendencia mediocre que debería hacer reflexionar a los populares, con el Gobierno así no deberían estar a la baja.
El PSOE, aunque en los últimos meses tenga una tendencia alcista, en realidad tiene un panorama muy complicado, sobre todo porque no ha logrado recuperarse, más de medio año después, del golpe que recibió con el informe sobre Cerdán de la UCO, sigue un punto por debajo en el mejor de los casos.
Dado el calendario judicial y de escándalos al que se enfrenta, ¿cuánto tardaremos en ver otra noticia que tenga un efecto parecido? Mucho o poco, es solo cuestión de tiempo un nuevo ‘cerdanazo’ que les haga caer otro escalón.
Además, tiene que afrontar todos sus escándalos con una situación muy mala en el Congreso: aunque no haya moción de censura Junts ha anunciado que vetará todas las iniciativas del ejecutivo e incluso se empieza a hablar de una agenda alternativa que supusiese que los de Puigdemont, el PP y Vox aprobasen leyes en contra del Gobierno, lo que sería un nuevo golpe y generaría una situación difícil de sostener hasta para Pedro Sánchez.
Para Vox, por el contrario, el panorama es alentador: su estrategia está funcionando muy bien aunque falta por ver qué ocurrirá cuando su labor de oposición al PP se enfrente a las urnas, por ahora, los de Abascal se están viendo, al menos a nivel demoscópico, muy reforzados.

