El chef marbellí Dani García se ha empeñado en llenar todos los rincones con sus restaurantes para el deleite de propios y extraños. A la reciente apertura de Tragabuches en Madrid, del que espero hablaros pronto, se unió el pasado mes de septiembre el de su "bar resalao" Lobito de Mar, el segundo que abre en la capital y el cuatro en total, junto al matriz de Marbella y a otro en Doha.
La filosofía de este restaurante es la misma. Cuando algo funciona, ¿para qué cambiarlo? Dani García trae el sabor del mar a Madrid en un refugio del Mediterráneo que en este nuevo emplazamiento cobra más sentido aún. Lobito de Mar está ubicado en el nuevo y lujoso centro comercial LaFinca Grand Café, en la Avenida de Luis Cerceda, 5 (Pozuelo de Alarcón) y su lago te trasladará a esas comidas y cenas de verano que tanto añoramos en esta época invernal, al menos el que escribe estas líneas.
Una carta apetecible de principio a fin y dividida en tres partes, con sus entrantes, sus platos de la pesca diaria, los arroces de estilo alicantino y su sección fiundamental de la oda al atún rojo. Los entrantes, marinos y vegetales, como el rico aperitivo de gazpacho que nos sirven y espectacular la ensaladilla Lobito de anguila ahumada y piparra (16€), el toque del pez en la boca eleva este tradicional plato a una capa superior. También tienes opciones de ensaladas, anchoas, sardinas, croquetas o algún ejemplo de la típica fritura malagueña.
Pero si eres más de marisco y de moluscos, cuentas en la carta con una extraordinaria selección de ostras, coquinas, almejas, concha fina o la gamba blanca de Málaga, los langostinos de Salúcar, la gamba alistada de Huelva o las cigalas y carabineros XXL. Eso sí, para ponerle un piso con vistas al mar son las quisquillas de Marbella (39€), al natural aliñadas con limón, pimienta y mayonesa de AOVE.
La bodega del "bar resalao" está a la altura de su producto y cuenta con una amplía variedad de referencias, desde espumosos nacionales e internacionales a vinos blancos y tintos de las mejores denominaciones de origen además del extranjero. Sin olvidar el apartado señalado que Dani García dedica a los vinos de la zona del sur de España.
La terraza del lago
El nuevo local de Dani García ocupa uno de las zonas privilegiadas del nuevo centro de ocio de esta localidad madrileña. Con capacidad para más de 200 personas, el restaurante está dividido en varios espacios adaptados a las necesidades de los comensales. La zona interior cuenta con una imponente barra y mesas altas que son perfectas para una comida o picoteo informal ya que, además, tienes la opción de pedir medias raciones de la carta y así probar más platos, incluso para compartir.
Dejando la zona de la cocina llegas al salón principal y zona al aire libre donde podrás disfrutar de la experiencia más relajada y cómoda, con las mesas revestidas por manteles de tele blanca y unos confortables sofás. Otra segunda terraza, que sin duda va a ser la sensación de esta primavera verano ya que cuenta con dos mesas sumergidas en el lago y que conforman un espacio único en el que también podrás disfrutar de sus cócteles de autor.
Todo el diseño de interiores está inspirado en el mar, con una paleta de colores azules y con rayas que recuerdan a la costa malagueña. Las texturas craqueladas inspiradas en la sal, un elemento fundamental del mar, así como las esculturas que simulan el movimiento del agua, crean un ritmo dinámico que transporta a los comensales a un universo marítimo.
Y la oda al atún rojo
Y no te puedes ir de Lobito de Mar sin probar alguna de sus exquisiteces del apartado "Oda al atún rojo". Tienes en crudo, en tapas y guisos o al grill. El carpaccio de chuletón con aceite de oliva es un espectáculo y ya os hablé de él en otro artículo en Libertad Digital, pero también tienes cuatro opciones de tartar o hasta seis partes del atún pasadas por la plancha. En nuestro caso probamos una deliciosa tosta de o’toro con umai caviar (35€). El atún está aliñado con grasa de jamón lo que le da un contraste espectacular, unido al sabor yodado del caviar y la tosta hace que cada bocado sea puro umami.
Para terminar con lo que nos trae el mar y las lonjas, una fresca y sabrosa lubina con costra de sal negra (79€ / kg), a la sal le añaden alguna hierba aromática para que la carne del pescado se impregne de su aroma. La tarta de queso de Dani García es un clásico en sus restaurantes, pero en esta ocasión probamos la tarta de queso con trufa (12€) que le da un contraste salino muy interesante.
El nuevo Lobito de Mar no está, como el otro, en pleno barrio de Salamanca, está a las afueras de Madrid, en nu nuevo centro comercial que cuenta ya con varios restaurantes y que continuará abriendo más, además de varias tiendas. Pero es una opción muy interesante si quieres huir del bullicio de la capital, respirar aire puro, tranquilidad y disfrutar de una carta muy interesante basada en el producto que nos proporciona el Mar Mediterráneo. Su horario es de lunes a domingo de 12:00 a 1:00 y el horario de cocina es, para el almuerzo, de 13:00h a 16:30h y, para la cena, de 19:30h a 0:00h. El ticket medio de Lobito de Mar para la barra es de 20-40€ y para la sala de 45-70€. El centro comercial cuenta con una oferta de párking de tres horas gratuitas por su reciente apertura.
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