Rafa Nadal se ha clasificado para cuartos de final de Roland Garros por séptima vez en su carrera. El manacorense ha pasado por encima del argentino Juan Mónaco, su mejor amigo en el circuito, al derrotarlo en tres sets y en menos de dos horas de partido, manteniendo su camino inmaculado en el torneo parisino, que ha ganado en seis ocasiones (todos los años desde su debut en 2005 salvo en 2009, cuando cayó en octavos de final frente al sueco Robin Soderling).
Mónaco, número 15 del mundo, era la primera piedra de toque para el balear. Pero éste ni se ha inmutado. Nadal se planta en la ronda de los ocho mejores sin ceder un solo set, habiendo perdido sólo 19 juegos en cuatro partidos. En el de este lunes, tan sólo cedía dos en el primero de tres parciales sin historia.
En una tarde desangelada por el frío y el viento en la pista Suzanne Lenglen, Nadal terminaba propinando a Mónaco una derrota similar a la de la final de la Copa Davis el pasado año en Sevilla (6-1, 6-1 y 6-2). Sin piedad, desarbolando con su derecha el juego de Mónaco, un jugador que ha sumado esta temporada 16 victorias en tierra por sólo cuatro derrotas, el tenista de Manacor se disparó desde el 1-2 del primer set a una carrera imparable, ganando 17 juegos consecutivos, llevando el desánimo al entrenador de Pico, Gustavo Marcaccio, que observaba en la grada cómo su pupilo era destrozado.
Almagro dijo antes que Nadal era el hombre de la tierra y su frase resultó premonitoria en una tarde en la que el zurdo español hizo añicos al hombre que destruyó en la ronda anterior al canadiense Milos Raonic en cinco duros sets.
Por lo visto a lo largo de esta semana de torneo, ni el italiano Simone Bolelli -en el debut-, ni el uzbeko Denis Istomin, ni los argentinos Eduardo Schwank y Mónaco. Ninguno de los cuatro ha sido rival a la altura del número dos de la ATP, que en cuartos de final protagonizará un duelo fratricida español frente a Nicolás Almagro (13), quien horas antes daba cuenta del serbio Janko Tipsarevic (8) por un triple 6-4 en dos horas y 13 minutos.
Al igual que Nadal y Almagro, un tercer español se ha plantado en la antepenúltima ronda de Roland Garros sin perder un solo set. Se trata de David Ferrer, verdugo este lunes de Marcel Granollers. El de Jávea, sexto en el ránking mundial, alcanzará las semifinales del Grand Slam de la tierra batida por primera vez en su carrera si el miércoles elimina al vencedor del duelo entre el escocés Andy Murray y el francés Richard Gasquet.