L D (Agencias) De este modo se manifestó Blanco en rueda de prensa tras la reunión de la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE, donde quiso dejar claro que la dirección nacional del partido respaldará la decisión que adopte Patxi López y la ejecutiva del PSE.
El resultado que este domingo obtuvo el PSE en los comicios vascos, que Blanco calificó de "históricos", lo "gestionarán los propios socialistas vascos", depositarios de "una gran confianza popular", por lo que es a ellos "a quienes corresponde traducir esa confianza en la decisión política más acertada". "Así lo han venido haciendo con nuestro respaldo y así lo seguirán haciendo, también con todo nuestro respaldo", apostilló el número dos del PSOE.
No obstante, insistió en que el PSE está "en condiciones de liderar en solitario" un gobierno de cambio en el País Vasco, si bien el nuevo ejecutivo será fruto de las negociaciones y el diálogo entre las fuerzas políticas.
Blanco consideró prematuro extraer conclusiones sobre el futuro apoyo del PNV a los Presupuestos Generales del Estado y a otras iniciativas del Gobierno central "hasta ver la evolución de lo que va a ocurrir en el País Vasco". La conclusión más clara, agregó, es que los resultados del domingo abren la posibilidad de que López sea lehendakari.
Respaldo a Patxi López
El candidato socialista a ocupar Ajuria Enea anunció el domingo que no renunciará a presentar su candidatura a lehendakari. "Nosotros le acompañaremos y le respaldaremos en los pasos que vaya dando a partir de este momento y en todas las iniciativas que adopte", afirmó José Blanco.
Preguntado por si un hipotético gobierno de coalición entre PSE y PP sería un ejecutivo "frentista", Blanco recordó que en su partido siempre han abogado por evitar "los choques de trenes" y precisado que la sociedad vasca es plural y diversa, y debe ser gobernada por una mayoría que apueste por la convivencia y por superar los frentes.
Sobre un posible pacto entre PSE y PNV, el vicesecretario del PSOE indicó que no serán los socialistas los que decidirán el futuro del lehendakari en funciones, Juan José Ibarretxe, sino el PNV, y reiteró que "en éste y todos los demás asuntos derivados de estas elecciones" la dirección nacional respaldará lo que decida Patxi López.
Gobernar en minoría
"Tenemos la determinación de promover el cambio en correspondencia con lo que han expresado los electores y nos gustaría gobernar de acuerdo a lo que pensamos y a la apuesta que hacemos para el País Vasco", subrayó Blanco. "Gobernar en minoría. Ese es el escenario que más me apetece", señaló.
Así, recordó que en la comunidad vasca se desarrolló una campaña electoral totalmente normal, en la que el terrorismo no conseguió irrumpir ni distorsionar y calificó de "éxito sin precedentes" el "espectacular" aumento del respaldo obtenido por la candidatura de Patxi López.
Unos resultados que, según Blanco, confirman el "camino ascendente" iniciado en los comicios autonómicos de 2005 y confirmado en las elecciones municipales de 2007 y en las generales de 2008.
Eso significa, resaltó el número dos del PSOE, que la línea política del PSE es la acertada, porque "sintoniza" con la sociedad, con el momento actual la comunidad vasca y con el deseo de la mayoría de los vascos de cambio y de convivencia que los socialistas de toda España comparten.
"A partir de ahora, la política vasca está llamada a experimentar una transformación sustancial", agregó Blanco antes de recordar que serán los partidos vascos quienes determinen la fórmula de gobierno, si bien la composición del nuevo Parlamento autonómico permite fórmulas alternativas que tendrán consecuencias "profundas, duraderas y positivas".
Errores en Galicia
Blanco admitió que se han cometido "errores" en Galicia, que deben ser reconocidos, analizados y asumidos, aunque descartó que en los adversos resultados haya podido influir la coyuntura política nacional.
Pese a las diferencias personales entre ambos dirigentes, Blanco querido reconocer públicamente el trabajo, la dedicación y la honestidad política y personal del candidato socialista a la Xunta, Emilio Pérez Touriño, quien había presentado su dimisión como secretario general del PsdeG minutos antes.
Según explicó, el presidente gallego en funciones ya tenía pensado firmemente la noche del domingo presentar su dimisión, aunque prefirió no hacerlo ante la prensa y formalizarla este lunes ante sus compañeros de partido. Así se lo hizo saber en la mañana de este lunes por teléfono a Blanco, que opinó que se trata de una determinación que le honra.
Blanco negó su intención de optar a la Secretaría General del PSdeG, subrayó que la única tarea que le ocupa en estos momentos es la de ser vicesecretario general socialista y avanzó que en un par de meses puede convocarse un congreso extraordinario.
Cuotas de responsabilidades
"Yo también asumo la cuota de responsabilidad que tengo como gallego y como dirigente nacional del PSOE", proclamó en rueda de prensa, antes de apuntar que, aunque habrá que ver en qué medida la crisis económica pudo haber influido en los resultados, una de las principales razones del fracaso ha sido que la política realizada por la Xunta, que "había despertado mucha ilusión", no suscitó al final la confianza o la gente esperaba más de ese cambio.
De otra manera, agregó, no se puede entender que el PSOE obtenga en Galicia casi el mismo resultado que hace cuatro años y, en cambio, suba ocho puntos en el País Vasco. Así las cosas, puso el acento en la bajada de respaldo popular que han cosechado los dos partidos que han gobernado en los últimos cuatro años –PSdeG y BNG–, de tal manera que los gallegos han emitido "un voto crítico respecto al periodo político cerrado".
Y no ocultó que él había sugerido hace meses a Touriño la posibilidad de un adelanto electoral, consejo que finalmente fue rechazado por el presidente de la Xunta pensando "en el interés general".
Una vez que se escrute el voto del exterior, Blanco vaticinó que el PSdeG obtendrá finalmente 25 escaños, con lo que mantendría su actual representación parlamentaria, mientras que su socio de gobierno, el BNG, no ha podido revalidar sus resultados.
Felicitación a Feijó y Rajoy
El dirigente socialista expresó su felicitación al PP por su triunfo en Galicia y la extendió a su líder, Mariano Rajoy, si éste "se apropia del éxito y lo considera un éxito nacional y cree que le afianza en el liderazgo" del partido. Confesó, a este respecto, su "especial querencia" por que Rajoy continúe el frente del PP.
Blanco reconoció además que se implicó "a fondo" en los comicios gallegos, pero argumentó que siempre se implica en todas las campañas electorales porque es su obligación como dirigente nacional del partido. Con todo, juzgó que ahora todos deben analizar los resultados y abundar en sus causas, sobre todo para encontrar el camino que les permita de nuevo dentro de cuatro años recuperar la confianza de los ciudadanos y volver a gobernar en la Xunta.
Pero Blanco no quiere dejarse "llevar por la intuición" a la hora de hacer un balance de las elecciones gallegas, sino constatarla con hechos objetivos, razón por la cual se ha comprometido a efectuar un amplio estudio postelectoral, que profundice en las causas. "Hay que saber diagnosticar bien" para tomar el camino correcto que lleve a recuperar la confianza de la mayoría, observó.
No obstante, precisó que los socialistas gallegos tendrán que hacer autocrítica para conocer qué factores les han conducido a esta situación, para "inmediatamente después" proceder a un trabajo colectivo que permita poner en pie un nuevo proyecto político. Para esa tarea, el PSdeG "contará como siempre con el respaldo y la colaboración de la dirección federal", prometió Blanco.
Basagoiti se ofrece a López
El líder del PP en el País Vasco, Antonio Basagoiti, se declaró este lunes "dispuesto" a apoyar al candidato del PSE a lehendakari, Patxi López, y aseguró que la "única condición" para ello es que los socialistas acometan "un cambio de verdad" y estén por "otra política desde el punto de vista cultural, educativo, de convivencia y de futuro".
En declaraciones a RNE, el líder de los populares vascos dijo que confía en que PP y PSOE se pueden "poner de acuerdo". "Es muy importante que aparquemos nuestras máximas de partido y estemos en lo importante, que es el País Vasco", afirmó.
Basagoiti no aclaró cómo se podría materializar el apoyo del PP y subrayó que a él le interesa más que "el debate de los sillones o los coches oficiales" que se produzca el cambio. "Me importan más el fondo que las formas y todo eso lo podemos ver en los próximos días", apuntó.
En cualquier caso, el candidato del PP recalcó su "voluntad de colaborar al máximo en que las cosas cambien" y defendió que en estas elecciones "se ha conseguido el objetivo", de manera que habrá "una nueva mayoría" en el Parlamento vasco y el PP podrá "sumar junto con el PSOE para hacer un Gobierno distinto y mejor que el de Ibarretxe y su PNV".