MUJERES QUE CUENTAN CRÍMENES: ANNE PERRY (2)
Guerra, piedad, traición
Paladeando todavía el éxito de las novelas de los detectives Pitt y Monk, ambientadas en el Londres victoriano, Anne Perry ha acometido una saga nueva, que no es, en rigor, la típica serie policíaca, cada uno de cuyos libros tiene autonomía propia, empieza con uno o varios crímenes y termina o debería terminar con el descubrimiento del criminal y su muerte o puesta a disposición de la Justicia. En este caso, se trata de un vasto proyecto narrativo, al modo de los folletones del XIX, con el crimen de por medio pero sólo como una pieza más de la intriga.