Irak

Al menos siete personas murieron este sábado y otras 34 resultaron heridas por la explosión de dos coches-bomba en Irak, uno en Bagdad y otro en Mahawil (a 90 kilómetros de la capital). Por otra parte, al menos catorce peregrinos musulmanes (once paquistaníes y tres indios) murieron por los disparos de terroristas, cuando se dirigían a Karbala y Nayaf para visitar los lugares sagrados chiíes de estas localidades.

Trece soldados iraquíes fueron asesinados por terroristas chiíes en los enfrentamientos librados entre el domingo y el martes pasados en la ciudad de Diwaniya, a 200 kilómetros al sur de Bagdad. La denuncia la hizo este miércoles el ministro iraquí de Defensa, Abdulqader al Obeidy, en una reunión con jefes de clanes de Diwaniya, a donde llegó para informarse de los últimos combates en esa zona. "El ministerio de Defensa ha formado una comisión para investigar las implicaciones de la ejecución de 13 militares, y los resultados van a ser presentados al Gobierno para adopte los pasos pertinentes", subrayó Obeidy.

Al menos 37 personas han muerto y decenas permanecen hospitalizadas por dos explosiones registradas en un centro de reclutamiento que el Ejército iraquí tiene en Hilla y en un concurrido mercado de Bagdad. El Ministerio de Interior cifra los heridos en varias decenas. La primera bomba explotaba cuando los jóvenes reclutas hacían fila para entrar al edificio. La segunda, más potente, estallaba cuando en hora punta. Minutos después, un artefacto explotaba cerca de una gasolinera matando a dos personas. Por último, un coche-bomba explotaba en el este de la capital dejando cinco heridos.

Al menos 82 personas murieron y 150 resultaron heridas en la explosión de un oleoducto en las cercanías de la ciudad de Diwaniya, capital de la provincia de Al-Qadisiya, a doscientos kilómetros al sur de Bagdad. Las autoridades tratan de identificar a cuarenta de las víctimas mortales. El número de muertos podría aumentar por la gravedad de varios de los heridos.

Diez cadáveres con los ojos vendados y las manos atadas han sido encontrados por policías iraquíes en el barrio bagdadí de Al-Bayá. Los cuerpos presentaban impactos de bala y señas de haber sido torturados. El hallazgo se sucede a una jornada de terror en la que más de noventa personas murieron en diferentes ataques y atentados. De las víctimas, veinte eran efectivos de las fuerzas de seguridad y cincuenta terroristas chiíes. La mayor parte de los enfrentamientos tuvieron lugar en Diwaniya donde operan de manera conjunta los ejércitos de EEUU e Irak. Los miembros del autollamado "Ejército del Mahdi" que encabeza el clérigo radical Muqtada al-Sadr.

Los alrededores de la ciudad de Diwaniya es escenario de violentos combates entre terroristas y soldados de EEUU e Irak. Según fuentes oficiales, al menos 70 personas han muerto, entre ellas una veintena de militares, y otras setenta resultaron heridas. Los enfrentamientos comenzaron cuando miembros del autollamado "Ejército del Mahdi", del clérigo Muqtada al-Sadr, trataron de liberar a uno de sus dirigentes detenidos. En Bagdad, la Policía ha confirmado la muerte de trece personas tras un atentado terrorista suicida perpetrado en las inmediaciones de la sede del Ministerio de Interior y de un hospital. La mayoría de las víctimas mortales son guardias de seguridad y empleados y guardias de seguridad del organismo.

Cerca de 30 personas murieron este domingo y al menos 94 personas resultaron heridas en una nueva jornada de violencia en Irak. En los atentados más recientes, siete personas perdieron la vida y 20 fueron heridas en dos atentados suicidas simultáneos perpetrados contra un canal de televisión kurdo y contra la casa de un pariente del presidente iraquí, el kurdo Yalal Talabani.

Al menos trece personas murieron y doce resultaron heridas  en nuevos atentados registrados en el norte y el sur de Irak, así como en Bagdad, donde fue inaugurada este sábado una reunión para la reconciliación nacional con la participación de alrededor de 500 líderes tribales. Cinco de las 13 víctimas mortales perdieron la vida en Baquba, cuando un grupo de pistoleros atacó con fusiles a varios civiles que viajaban en dos coches en una carretera de esa ciudad, al noreste de Bagdad.

El Tribunal Penal Supremo de Irak ha decidido posponer al 11 de septiembre el juicio contra el ex presidente Sadam Husein y seis altos cargos de su régimen por genocidio contra el pueblo kurdo durante la campaña "Al Anfal", entre 1987 y 1988. Esta campaña fue lanzada por el Ejército de Sadam contra el Kurdistán iraquí, en el norte del país, y causó la muerte de decenas de miles de personas. Los siete antiguos dirigentes están sometidos a un primer juicio, iniciado en octubre pasado, en relación con la matanza de 148 chiíes tras un supuesto intento de asesinado contra el ex dictador en la aldea Al Duyail en 1982