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10 Ideas Por Si Toca El Gordo

Como todo el mundo, tenemos nuestras fantasías en relación al Gordo de Navidad. "Si me tocara la lotería...", entonamos al alimón con media humanidad. Para que toque, hay que jugar, y tú y yo somos pésimos a la hora de acordarnos de comprar décimos. Menos mal que tenemos los que adquirimos a través de las empresas con las que trabajamos, o los que alguna amiga obliga a conseguir.

Como estás ocupado grabando el programa de televisión con el que la MTV piensa contra-programar el discurso navideño del Rey (según la cadena, un "Rey del Glam" con un discurso diferente), me adelanto el turno en este blog para poner por escrito mis ensoñaciones.

La verdad es que con que nos quedemos como estamos sería suficiente, hasta ahora tenemos una capacidad de trabajo incuestionable y ofertas suficientes para llevarnos al agotamiento y hasta a la crisis conyugal. Somos unos privilegiados, y eso ya es una lotería, pero a nadie le amarga un dulce navideño, así que, por soñar, que no quede.

1- Correría a comprar el piso que venden en uno de nuestros edificios favoritos de la Gran Vía. Sería una opción estupenda para ampliar nuestra idea de hogar.

2- Una vez conseguido ese piso, nos sobraría espacio en el otro que tenemos que reformar, donde tengo que ubicar mi biblioteca inglesa. Así que se lo podríamos regalar a Nancy O, reforma incluida. Me temo que ese sería el único regalo material que aceptarían de forma indirecta tus padres, aunque seguro que podríamos encontrar alguna otra forma de alegrarles las fiestas.

3- Mi madre es mucho más fácil, todo le viene bien. Pero me consta que a punto de cumplir 82 años no quiere quedarse sin conocer algunos destinos lejanos, como Arabia Saudí, Hong Kong, Shangay, Pekín, Moscú, San Petersburgo... así que la podríamos poner a viajar durante semanas acompañada de su amiga Alejandra.

4- Para ti, y ya que tendríamos nuevas paredes que llenar, habría que buscar un Warhol de lujo, como alguno de la serie plateada de Elvis.

5- Yo me compraría unas cuantas joyas, esas que siempre me paro a mirar en el escaparate : diamantes de la colección Elite de Suárez; anillos y pulseras con forma de ofidio de la serie Serpenti de Bulgari; y alguna de las piezas maravillosas de la colección Panthère de Cartier.

6- Una vez saciados nuestros delirios de luxe, toca ponerse mecenas. ¿No te encantaría convertirte en productor? Por ejemplo, una nueva película para Félix Sabroso y Dunia Ayaso. O financiar sin agobios la obra de teatro que han escrito para Bibiana Fernández y Lolés León. Siguiendo en la misma línea, podríamos invertir en el lanzamiento internacional de David Delfín como firma de moda, para poder comprar sus diseños en Sack’s o Harrod’s.

7- Una última locura del mecenazgo sería adquirir la casa que perteneció a Blanca Sánchez para convertirla en museo, con todas sus cositas personales y la obra artística, y podríamos adquirir nuevos fondos de esos artistas que formaron parte de su vida.

8 – Podríamos comprar con publicidad un espacio televisivo nocturno en Libertad Digital y otro radiofónico en EsRadio, así tendríamos programas para poner películas, hacer entrevistas, actuaciones de grupos...

9- Tendríamos que comprar un local muy grande y acondicionarlo como cocina y comedor para dar desayunos, comidas y cenas para quien lo necesite. Un lugar bonito, decorado para que no resulte como un hospital y donde la gente se sienta a gusto. Y fíjate los puestos de trabajo que crearíamos para mantenerlo.

10- Por último, y en la misma línea, un refugio para animales abandonados o maltratados, aunque me temo que si llegamos a tener un lugar así te iba a ser muy difícil conseguir sacarme de esas instalaciones. Me veo allí acampada como una homeless, rodeada de animales y con el Síndrome de Noé peligrosamente instalado en mi carácter. Y ni te digo de mi alergia al pelo de los animales.

Bueno, soñar es gratis. En cualquier caso, a quien le toque, que sirva para aliviar el peso de la vida. Y a los que no, felicidades y a seguir luchando.

Vamos a usar este espacio para comunicarnos, dejarnos recados, enseñarnos las fotos y noticias que descubrimos... para contarnos todas esas cosas que no nos da tiempo a comentar en el día a día. Esto es, en definitiva, un blog cerrado al que sólo tenemos acceso nosotros dos, una extensión de nuestra vida

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