Mucho humo y pocas luces
Si hay algo que Barack Obama y su equipo saben hacer bien es controlar la comunicación y los tiempos mediáticos. El problema es que tras una larga campaña electoral y a sólo unas semanas para alcanzar los primeros cien días de presidencia, hay ya en el ambiente un tufillo de saturación mediática en torno a Obama. Las dos semanas anteriores al viaje europeo del señor presidente, los norteamericanos tuvimos Obama hasta en la sopa: entrevista televisiva con Jay Leno (con la bromita de los “paralímpicos”…); otra entrevista presidencial en el programa “60 minutes”; otra conferencia de prensa en la Casa Blanca con inmenso teleprómpter; otro encuentro “virtual” televisado desde la Casa Blanca… y así día sí y noche también. Y luego… lo del viajecito a Europa, con el glamour desplegado por la pareja presidencial y la cantinela servida con discursos, ruedas de prensa, declaraciones, fotos… y con Zapatero como guinda al pastel. Aquí, valga aclarar, lo del presidente español ha pasado bastante desapercibido.