Muchos espectadores rechazan el cine de terror por, nunca mejor dicho, el miedo a los sustos. Pero de eso va precisamente este vídeo: de "jump-scares", de esos momentos en los que la platea salta de improviso ante un golpe de música o la aparición súbita del monstruo.
Algunos films tratan de generar atmósferas inquietantes o malsanas, pero ocasionalmente recurren a sustos para mantener atentos al espectador, con la sensación de que algo amenazante flota en el aire. Otros prefieren cultivar más esta segunda opción y convertirse en un festival de sustos capaces de enervar al más pintado.
Sea como fuere, esta breve colección de "jump-scares" o sustos repentinos demuestran que se trata de un recurso legítimo que nunca pasará de moda. ¿Te animas? No te olivdes de seguir el canal @LoDeCultura de Youtube y darnos un like y un comentario.

