El Gobierno de España sigue invirtiendo mucho menos de lo que debería en materia de Defensa. Así ha quedado reflejado en las últimas horas en el informe anual de la OTAN que ha presentado el secretario general de la organización, Jens Stoltenberg. Todo ello pese al impulso inversor que ha supuesto la invasión rusa de Ucrania.
Los datos hechos públicos indican que el Gobierno de Pedro Sánchez es el segundo país aliado que menos dinero destinó a esta materia en 2022. Exactamente, el 1,09 por ciento de su PIB. España solo supera en los datos aliados a Luxemburgo. El pequeño país centroeuropeo tan sólo invirtió el 0.62 por ciento de su PIB en 2022. Los datos hechos públicos muestran una hay ligera mejoría respecto al año 2021, cuando España invirtió en Defensa un 1,03 por ciento de su PIB.
La cifra queda muy lejos del 2 por ciento del PIB que los países aliados se comprometieron a invertir en Defensa para el año 2024. De hecho, España debería duplicar su inversión en Defensa en dos años para cumplir con ellos. La realidad es que, según La Moncloa, el Ejecutivo central no destinará ese 2 por ciento a Defensa hasta el periodo 2028-2030.
Con lo que sí cumple España es con la regla de que el 20 por ciento de lo dedicado a Defensa se debe destinar a nuevo equipamiento. España es el decimotercer país de la OTAN que más dedica en este apartado, con el 26 por ciento destinado a inversión.