Autógrafos en mi Desván

No soy de acercarme a pedir autógrafos a mis ídolos, aún así siempre hay alguien que lo hace por mi. Esta es una pequeña muestra de mi colección de fotos autografiadas.

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A la gran guitarrista mi buena amiga olvido

Eso les firmó Peret a mis padres en esta tarjeta cuando le contaron que su hijita tocaba la guitarra. Yo tenía nueve o diez años y es el primer autógrafo que conservo.

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Para una simpática colchonera

Cuando llegué a España en 1973 tomé la decisión de rendirme ante el Atlético de Madrid y no ante los merengues. Mi preadolescencia fue de fanatismo futbolero. Tanto es así que mi madre consiguió una foto firmada del capitán del equipo de mis sueños.

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Guapo y guapo

Por aquellos años, Ramiro Oliveros me parecía el hombre más guapo del mundo. Viendo de nuevo esta foto afirmo que no estaba equivocada.

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Ricky Horror Show

Alfonso Nadal interpretaba a Frank-N-Furter en la adaptación teatral española del musical. La ponían en la sala Cerebro, debajo de mi casa, pero nunca pude verla por ser menor de edad. Años después alguien me consiguió este cartel firmado por el protagonista.

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¡¡Grande!!

Agustín González es uno de mis actores favoritos. Un buen amigo se encargó de hacerme llegar esta foto dedicada.

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Cruelmente tuya

Así firma siempre Elvira sus autógrafos. En su momento me dio rabia que se lo pidieran a nombre de Olvido y no de Alaska.

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Primer amor

El Sr. Spock interpretado por Leonard Nimoy en Star Trek fue el primer chico que me pareció guapo. Él y Hermann Munster de La Familia Munster. Mis gustos estaban definidos desde mi tierna infancia.

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Madre no hay más que una

Jacqueline, la madre vidente de Stallone, vino a un programa de televisión y un amigo del equipo de producción se encargó de que no me faltara mi regalo.

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Ozzy

Por una vez me atreví y le pedí a Ozzy Osbourne que me firmara esta foto, aprovechando que lo entrevisté para la revista Popular 1. Años después los dos tenemos nuestro reality de televisión.

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¡¡Diosa!!

Amanda Lepore es tan simpática y amable que tampoco me dio vergüenza pedirle un autógrafo cuando compartimos escenario en la sala Razzmatazz de Barcelona.