Afganistán

Las autoridades francesas han confirmado este domingo la liberación de uno de los rehenes galos capturados hace 24 días en Afganistán. Se trata de la joven cooperante, conocida sólo por su nombre de pila, Céline. Ésta, junto a tres amigos afganos y a un hombre, igualmente miembro de la ONG Terre d'Enfance, fue secuestrada el pasado día 3 de abril cuando viajaban por carreteras al sur del país. Los secuestradores, terroristas talibán, exigieron para su liberación, y la de sus colegas, la retirada de las tropas galas de Afganistán y la excarcelación de varios rebeldes.

Más de doscientos talibanes, entre ellos varios de sus líderes, se encuentran sitiados por soldados de la OTAN y del Ejército afgano en una zona del distrito de Chora, en la provincia de Uruzgán. El portavoz del Ministerio del Interior, Zemarai Bashary, explicó que los terroristas fueron sorprendidos mientras celebraban una reunión. El viceministro de la misma cartera, Abdul Hadi Khalid, aseguró que si los talibanes no se rinden a las fuerzas aliadas, los militares lanzarán un asalto. Las hostilidades se han recrudecido esta primavera en varias zonas del país centroasiático con continuos combates entre los terroristas y militares locales apoyados por miembros de la Alianza Atlántica. En los combates han muerto más de mil personas en lo que va del presente año.

El régimen de Pervez Musharraf decidió el año pasado obligar a los refugiados afganos a registrarse o marcharse. Su argumento: que muchos campos dan cobijo a insurgentes talibanes. Más de dos millones han optado por "legalizar" su situación, mientras que un número incierto, según la embajada afgana en Islamabad, unos 400.000, ha rehusado el trámite. Pakistán ha sido tierra de acogida para millones de afganos durante más de un cuarto de siglo, periodo en el que Afganistán sufrió la invasión soviética, una guerra civil entre las distintas facciones de muyahidines y la llegada en 1996 de los talibanes.

Pakistán y Afganistán se acusaron mutuamente de haber iniciado el tiroteo entre fuerzas de ambos países que se registró en torno a la valla recién instalada por los paquistaníes en la frontera común para controlar el paso de insurgentes. El intercambio de disparos, que no causó muertos, se produjo en el punto fronterizo de Angoora Adda, una de las zonas afectados por el plan paquistaní para vallar 35 kilómetros de frontera. Islamabad indicó que el incidente había sido comunicado oficialmente a la comisión tripartita formada por oficiales de ambos países y de la OTAN. Con su proyecto, las autoridades paquistaníes pretenden contrarrestar las acusaciones de que están dando cobijo a los talibanes que se infiltran y operan en territorio afgano.

Cuatro trabajadores nepalíes y un afgano de la oficina de servicios de la ONU en Afganistán han muerto tras la explosión de una bomba colocada junto a la carretera por la que circulaban en un vehículo oficial. El atentado ha tenido lugar en los suburbios de la ciudad sureña de Kandahar. El portavoz local de las Naciones Unidas, Adrian Edwards, dijo que "los ataques contra civiles son una clara violación de la ley humanitaria internacional y la ONU buscará el castigo para quienes están detrás de la acción".

De la táctica del suicidio a la del secuestro, o una combinación de ambas. Esa es la línea de actuación que parece extenderse entre la amalgama de grupos terroristas que operan Irak y en Afganistán. Este domingo ha trascendido que durante la noche del sábado, 15 personas fueron secuestradas en el sur de Al Duyail, a 60 kilómetros al norte de Bagdad. Lo han confirmado, este domingo, fuentes policiales iraquíes que explicaron que la captura se produjo después de un ataque de los terroristas a un puesto de control policial en Al Nibai.

Siete efectivos de las fuerzas y cuerpos de seguridad de Afganistán más un civil han fallecido, este sábado, en un atentado suicida haciendo explotar un chaleco-bomba enfrente de un cuartel de la Policía situado en la zona este del país, según informó el Ministerio del Interior. En suma, otras seis personas resultaron heridas a consecuencia de la acción kamikaze.

El jefe de la Policía de la provincia suroriental afgana de Zabul, Abdul Ghafar Sapai, ha confirmado que en una operación militar lanzada por el Ejército local, apoyado por tropas aliadas, al menos 35 terroristas talibanes han muerto. Una zona montañosa del distrito de Shah Joy ha escenario de los violentos combates que incluyeron bombardeos aéreos. Diecisiete motocicletas y dos vehículos propiedad de los terroristas fueron incautados.

Los servicios secretos militares italianos (SISMI) advirtieron hoy del recrudecimiento de la violencia en la provincia de Herat (oeste de Afganistán), donde se encuentran desplazados contingentes militares de Italia y España. En el informe semestral del SISMI presentado este miércoles al Parlamento se señala que "la situación en Afganistán continúa siendo sensiblemente crítica" debido a una "mayor actividad de las fuerzas contra la coalición internacional". Mientras en España, los socialistas siguen impidiendo la comparecencia de Zapatero para explicar la situación de nuestras tropas, y el Gobierno mantiene que se trata de una "misión de paz".