Llegué tarde esta mañana a la sección Aló Pablenin del programa diario de Ferreras en La Sexta y solo pude escuchar los últimos cincuenta minutos del mitin del líder supremo, pero aun así pude hacerme una idea cabal de las últimas ideas surgidas de esa cabecita coletuda y bolivariana. Fundamentalmente se trata de que los podemitas pueden vulnerar todas las leyes y apoyar los desmanes de cualquier desaprensivo porque unos del PP se han corrompido, lo que permite a estos ungidos eludir cualquier autocrítica con la sentencia, tan aplaudida por sus bases, de que ellos, al menos, no roban. Esto de compararse con lo peor de la política y salir ligeramente favorecido esmalta perfectamente el nivel ético de la muchachada paleomarxista y, de paso, nos permite avizorar lo que cabe esperar de ellos si alguna vez alcanzan el poder.
Pero, en la reprimenda cotidiana que Iglesias nos atiza a los españoles en La Sexta, hoy ha destacado especialmente su propuesta legislativa estrella del momento (mañana será otra distinta, ya que en Podemos las jeremiadas surgen a borbotones), consistente en despenalizar la venta callejera de artículos falsificados, ese sector emergente que la paleoizquierda ha adoptado tras los disturbios de Lavapiés como ejemplo de la nueva economía social.
La propuesta es interesante porque va directamente contra los intereses de las gentes de la cultura (podemita), cuya complacencia con los delincuentes apadrinados por la izquierda finaliza justo cuando los delitos amenazan con afectar a sus propios bolsillos. Si los de abajo okupan viviendas o destrozan locales ajenos, la solidaridad de la élite de la kultur es imperturbable. Ahora bien, si un puñado de inmigrantes ilegales trata de sobrevivir vulnerando la propiedad intelectual de los líderes canoros, la cosa cambia por completo y ahí se pide (qué coño ¡se exige!) la prisión permanente sin posibilidad de revisión.
Va a ser muy bonito ver si Serrat, Ana Belén y Mike Ríos, tan aficionados a los vídeos de promoción de la izquierda, deciden hacer uno para a la campaña pro legalización del top manta. Muchos estamos dispuestos a hacer lo necesario para que se convierta en viral.