Poco después de cumplir su segundo año en la Red, la Bitácora de Libertad Digital se despide. Como sabemos bien los liberales, cuando se pone algo en marcha, ni siquiera quien lo crea puede predecir qué caminos seguirá. Lo que se inició como un comentario editorial inmediato, que no necesitaba esperar al final de la edición del día para publicarse, se convirtió, principalmente, en una comunidad de usuarios de Libertad Digital que se comunicaba entre sí, casi siempre al margen del tema propuesto.
La Fiscalía ha decidido abrir diligencias contra la seráfica formación de izquierdas ERC, que ha empleado su posición de poder para extorsionar a quienes se encuentran por debajo de él; personal contratado que no tiene el puesto garantizado. La respuesta del consejero Joan Carretero, también de ERC, ha sido destituir al encargado de investigar los despidos, de simpatías convergentes. Echar tierra encima, como hicieron literalmente en el Carmelo; esa es la única respuesta del tripartito a la corrupción. Juegan con ventaja: saben que a ellos no se les va a investigar. Aún tendremos que agradecerles que sólo despidan al 3% de quienes se niegan a ser extorsionados. Más o menos.
El presidente Rodríguez ha estado ausente del debate más importante de los últimos años, el que ha precedido a una aprobación por la mínima nada menos que del Estatuto que convierte a Cataluña en una nación desde el punto de vista jurídico. Rodríguez no ha querido hablar al Parlamento, pero lo ha hecho ante las cámaras de una televisión amiga.
Allí no ha destacado el brillante discurso de Rajoy, sino lo que ha llamado el “discurso por la paz” del “líder de la izquierda abertzale” Arnaldo Otegi. Otegi, líder de Batasuna, ilegalizada por ser declarada una parte de la banda asesina ETA, está en prisión por incitar al terrorismo, al crimen. Es decir, a la paz como la entiende ETA. Una paz que se basa en el chantaje criminal por parte de los asesinos y en la renuncia a la justicia por parte del Estado. En la renuncia a las libertades y a la dignidad personal y nacional. Esa es la paz se Otegi.
Rodríguez, líder de la izquierda desnacionalizada, tiene en su horizonte las palabras del “líder de la izquierda abertzale”, mientras desprecia la mano tendida de Rajoy para que salga del proceso de derribo nacional en que ha embarcado a España.
Lo de Marbella no tiene nombre: primero Gil, luego Julián Muñoz, ahora Marisol Yagüe y una punta de funcionarios. Si hay un Ayuntamiento fallido es éste, donde, a lo que se ve, y como diría el tango, "el que no llora no mama / y el que no afana es un gil [sic. y en minúsculas, aclaramos]".
Qué vergüenza. Y qué manera de matar, con premeditación, alevosía y tremenda idiocia, la gallina de los huevos de oro.
Es San Bernabé el patrón de la bella localidad andaluza, pero su clase política parece encomendada al Tempranillo o a Barrabás.
Acabarán convirtiendo la Ciudad de Mármol en un erial.
Hoy es un día para estar agradecidos a todos nuestros accionistas, que han demostrado en la junta general de Libertad Digital la fidelidad a un proyecto periodístico que "defiende la libertad, la economía de mercado, la civilización occidental, las libertades y la nación española, en la que residen éstas", como ha afirmado nuestro editor Federico Jiménez Losantos. Un proyecto que cuenta cada vez con más seguidores, como demuestra que lleve dos años consecutivos doblando el número de lectores.
Los más atentos habrán reparado en que Libertad Digital cuenta con una nueva bitácora, la de nuestro colaborador Pío Moa. "Presente y pasado" es el nombre de este nuevo blog, en el que el historiador de profesión y periodista por sus estudios nos ofrecerá sus comentarios.
Las cifras de OJD, que al contrario que las del EGM no funcionan por encuestas sino por control de venta y reparto, no han dado noticias demasiado agradables para ABC y El País. Mientras el segundo se hace progresivamente más difícil de diferenciar del BOE, desde que Zapatero está en el poder, el ABC se ha convertido en un periódico al que no le gustan sus lectores. El que fue el diario monárquico, católico, derechista y del Madrid prefiere, desde la venta a Vocento, cortejar a quienes son de derechas, pero no mucho, y votan al PP, pero quieren que la izquierda no les mire mal. A "maricomplejines", en definitiva. Su descenso en ventas confirma que esa especie ha descendido desde el 13-M, mal que le pese a Gallardón.
Mientras tanto, La Razón y El Mundo van comiendo el terreno que les separa de sus más inmediatos predecesores en ventas. Y es que el mundo feliz que se nos intenta vender desde las terminales impresas del duopolio de izquierda y derecha domesticada convence cada vez menos.
Este Gobierno es fuerte y arrogante con los débiles, con quienes se dirigen a Moncloa solo con millones de firmas, con quienes solo salen a la calle para protestar, con quienes se han revelado frágiles ante los pistoleros con aspiraciones políticas. Pero es débil y sumiso, humilde y arrastrado con los poderosos.
Y si alguien es poderoso en España, ese es Jesús Polanco. Se saltó la ley para acabar con quien legítimamente le había superado en las ondas hertzianas. El Tribunal Supremo falló en su contra, como si la ley tuviera algún valor en España. El Gobierno de Aznar tomó la decisión de no hacer cumplir la ley. Y, ya en el poder, Jesús Polanco informa a Zapatero, su lacayo, que tiene que dar cobertura legal al antenicidio.
Pero hay quien habla de esperanza, de ilusión y de alegría. Y quien brinda con cava y recuerda, joseantoniano y ebrio de eufemia abyecta, a los "ausentes involuntarios".
Tienen moral de esclavo, o el Síndrome de Esto(es-el)colmo, o una foto de Chamberlain en la cartera. También hay tontos entre ellos, pero no de los mansos sino de la peligrosa especie de los turbulentos. Algún ingenuo habrá (después de tantos años). Y una punta de miserables, claro.
"No es momento de...", hay que oír. Claro que lo es. De hecho, es el momento de decir, insistir, proclamar alto y claro: No a la negociación con ETA.
Como decía Enrique Múgica en fechas recientes, con los asesinos sólo cabe dialogar como lo hace la escoba con la basura.
Dado que todo aquel que hasta el momento se ha opuesto, con razones de peso, a los argumentos del gobierno para aprobar la OPA de Gas Natural a Endesa, ha sido tachado de seguir instrucciones del Partido Popular, es de suponer que Miriam Iglesias, la juez que ha fallado a favor de Endesa, seguirá el mismo camino. El acuerdo previo con Iberdrola, imprescindible para financiar una operación consistente en que un pez chico se coma al grande, supondría una concertación previa entre ambas empresas que impediría la competencia en el sector energético.