La Fundación Atman, un aparatoso tinglado que se debe a la generosa contribución de un millón de euros gratis et amore de un empresario iraní, acaba de nacer. A su frente se encuentra Teresa Aranda, esposa de Juan Luis Cebrián y periodista de profesión. Como bautizo de sus actividades en sociedad han anunciado una pomposa reunión a la que han llamado Encuentro, Atman, claro. Todo muy chic, muy radical chic. Pero no nos engañemos, es aquí donde está la chicha porque en el próximo Encuentro Atman, que se celebrará en un lujoso hotel madrileño el próximo viernes, podrán disfrutar los invitados de un ponente de excepción: Tarik Ramadan, uno de los ideólogos más bizarros del islamismo en occidente.

Muchos quizá no le conozcan y esta puede ser una buena ocasión para ello. José María Marco ha preparado para nuestros lectores un sucinto perfil del personaje en cuestión. No tiene desperdicio. Lógico que en Estados Unidos no pueda entrar y que en Francia no quieran ni verle. Hacen bien el embajador de Israel y Gustavo de Arístegui en no querer sentarse a su lado. Usted, probablemente, tampoco lo haría.