El mismo día en que hemos sabido que, a lo largo de 2004, el precio de la vivienda ha aumentado un 14 por ciento, la ministra del ramo, María Antonia Trujillo, ha salido de nuevo a la palestra para insistir sobre su nonato plan de vivienda, sobre sus famosas "soluciones habitacionales" de las nunca más se supo desde que fueron anunciadas a bombo y platillo. La ministra ha asegurado que este año en el que acabamos de entrar en "crucial" para la política que el Gobierno está desplegando en todo lo relativo a la vivienda.

Tal vez la ministra ignore que el verdadero problema de la carestía de la vivienda es la escasez de suelo edificable, lo que ocasiona que este bien se compre y venda a un precio muy elevado. Por mucha voluntad que le ponga el Gobierno, por muchas leyes que se saque de la manga, por mucho que cacareé aquello de los derechos constitucionales a una vivienda digna, si el suelo es prohibitivo la vivienda también lo será. Parece mentira que tan elemental noción de economía no termine de entrarle en la cabeza.