Seis años ha tenido que esperar el FC Barcelona para volver a ganar la Liga. Frank Rijkaard ya dio al equipo otros aires la pasada temporada tras realizar una segunda vuelta magnífica y, en esta campaña, su trabajo se ha visto recompensado. El Barça ha dominado el campeonato de principio a fin y sólo se ha visto presionado en los últimos instantes por el arreón final del Real Madrid. El equipo blanco, después de haber conseguido siete victorias consecutivas, debió ponerse las pilas muchísimo antes para impedir que el conjunto azulgrana haya cantado el alirón en el Ciudad de Valencia a dos jornadas para la conclusión.

 

Eusebio Sacristán, integrante del cuerpo técnico del Barcelona, comparaba no hace mucho al equipo actual con el Dream Team, al que él perteneció. Dice que éste es un Barça que tiene más equilibrio que aquel equipo que deslumbró al mundo hace una década. Porque el fútbol de ahora es precisamente eso: equilibrio. Y ahí es donde aparece el trabajo de Puyol, Xavi, Iniesta, Deco y Márquez, sin olvidarnos –como no podía ser de otra manera– del talento de Ronaldinho y la efectividad goleadora de Eto’o.