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Vandalismo digital

El ataque realizado contra el sitio web creado por el PSOE como parte de su campaña ante las elecciones europeas es un acto de puro vandalismo digital. No se puede justificar una acción de este tipo. Es una injustificable violación de varios derechos.
 
Este crackeo, como cualquier otro supone un ataque contra la libertad de expresión. El PSOE, como cualquier partido, asociación o empresa, tiene todo el derecho del mundo a expresarse a través de Internet sin que nadie se lo impida. En el caso de que los contenidos de un sitio web supongan un delito, y este no es el caso, tan sólo los tribunales tienen derecho a actuar.
 
Además estamos ante un claro ataque contra la propiedad, un derecho inalienable y reconocido como tal en la legislación española. El sitio web es propiedad del PSOE, al igual que sus sedes y otros bienes que posea. Nadie que no sea ese partido tiene potestad para hacer uso de él sin su permiso, con independencia del motivo que les mueva.
 
Cabe preguntarse qué motivos han movido a los crackers que han actuado contra el sitio electoral socialista, aunque nunca justificarían esta acción. Esta claro que pretenden dañar al PSOE, pero la firma hace sospechar que también al PP. En cualquier caso no han hecho bien a nadie. Por mucho que se pueda compartir su rechazo a ETA, las actuaciones de la SGAE, la corrupción política o las patentes de software, no se puede defender lo que han hecho. Esta acción viola los derechos más básicos del PSOE, pero también daña a quienes dicen defender, puesto que trata de vincular su vandalismo con esas causas.

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