Desparpajo, naturalidad y carácter son los rasgos de un piloto rápido y decidido en la pista. Cualidades que ya le han valido a Pedro Acosta dos Mundiales. El segundo, lo ha logrado en Moto2 este fin de semana en el GP de Malasia con tan sólo diecinueve años, convirtiéndose en el piloto más joven en conseguir dos títulos de campeón del Mundo, batiendo a Marc Márquez.

El piloto de Mazarrón llegó al Mundial en 2021 y desde entonces ha conseguido dos mundiales en tres temporadas y la próxima ya le veremos codearse con los mejores en MotoGP junto a KTM.

Acosta eclipsa a los demás por su carisma y conquista en la pista por ser un piloto que aprende rápido y no se achanta ante nadie. Un piloto que ha sabido rodearse de gente de confianza y alejarse lo suficiente del foco como para que los triunfos no le afecten o le cambien demasiado. El fenómeno Acosta, pese a ser ya una realidad, está aún por llegar y seguro que le dará muchas alegrías al único equipo que, junto a Aprilia, ha conseguido en la categoría reina, inquietar algo a las todopoderosas Ducatis.

Acosta lidera una generación de pilotos españoles, que han crecido con Marc Márquez como referencia, que no han hecho tanto ruido en las categorías inferiores pero que llevan ofreciendo podios a la afición española prácticamente cada fin de semana de carreras.

De hecho, la carrera que le ha dado el título a Acosta en Malasia ha sido un auténtico recital de los pilotos españoles que han conseguido un triplete, liderado por Aldeguer, con Acosta segundo y Ramírez cerrando con su primer podio el tercer cajón.

Y las cosas son parecidas en la categoría más pequeña, Moto3, donde Jaume Masiá sigue líder de la clasificación de pilotos a dos grandes premios del final de la temporada.

Y pese a que en MotoGP, por los problemas de la Honda, hemos perdido a nuestro mayor activo, Marc Márquez, el madrileño Jorge Martín, pese a no subir al podio en Sepang, podrá luchar hasta el final por conseguir proclamarse campeón del mundo en detrimento del italiano y vigente campeón, Peco Bagnaia.

Es una batalla difícil, los dos corren con la misma moto, pero Martín cuenta con una desventaja que puede decidir el Mundial, el control de las presiones de los neumáticos. Jorge Martín ya tiene una advertencia y podría ser sancionado en el caso de que volviera superar el límite. En cambio, Bagnaia cuenta con un as en la manga, y podría jugar con las presiones, sobre todo en Valencia, sin miedo a ser sancionado.

En cualquier caso, este fin de semana, el motociclismo español está de celebración. Es algo extraordinario que parece que le hemos dejado de dar valor, pese a que nuestros campeones siguen siendo campeones de récords.