La ministra que ha sido cocinera antes que "fraila", la  misma que confunde el latín con una serie de dibujos animados, la que habla del cine europeo como "propositivo", nos ofreció ayer una faceta más de su infinita sapiencia. En la presentación de un documental sobre el grupo de rock duro Metallica djo Carmen Calvo, esto es, Carmen Calvo dixit, que "un concierto de rock en español hace más por el castellano que el Instituto Cervantes". Lo que nos lleva a pensar que todo el inglés que sabe la ministra -ya sea mucho o poco- se debe a las pegadizas letras de Metallica, banda de la que es, según ha relatado, una gran aficionada.

Dejando a un lado las preferencias musicales de Calvo, porque para gustos se hicieron los colores, no deja de sorprendernos y de preocuparnos que haya tantos miembros de Gobierno compitiendo al tiempo por soltar la estupidez más gorda de la legislatura. Como son unos cuantos el listón va subiendo y, claro, lo que al principio era noticia ahora no pasa de un simple breve que lleva la inevitable apostilla de "-¿Sabes la última de la Calvo, o de la Trujillo.... o de Moratinos?"